El periodista K se enfrentó con numerosos referentes de la oposición tras la polémica iniciada con el viaje que hará junto a su esposa y sus dos hijos al Mundial de Qatar. El paquete más económico equivale a unas 18 veces su salario.
Días atrás, el periodista kirchnerista Diego Brancatelli publicó en sus redes sociales una foto en la que se lo observa junto a su esposa y sus dos hijos, disfrazados con los colores del seleccionado argentino de fútbol. “A 19 días del sueño más grande de nuestras vidas. ¡Qatar allá vamos! ¡Vamos Argentina!”, escribió.
Horas después, el dibujante Nik publicó la misma foto, con un mensaje lapidario para el periodista: “Brancatelli se va a Qatar con toda su familia. Dice que paga el viaje para cuatro personas con su sueldo de coordinador ejecutivo de la municipalidad de Pilar. El día que se terminen estos tipos que viven del estado, o sea de la tuya, este país sale adelante”.
La respuesta de Brancatelli no se hizo esperar. Estratégicamente, optó por no responder a la acusación principal, sino enojarse porque la fotografía publicada expuso a sus hijos, menores de edad. “El sinvergüenza de Nik exponiendo menores. Porque se puede ser miserable, pero este plagiador además es un hdp”, aseguró.
Los números, sin embargo, parecieran dejar al panelista de Argenzuela en una posición delicada. Un pasaje aéreo a Qatar desde Buenos Aires oscila entre los 1.000 y los 1.500 dólares por persona. A ello hay que sumarle el alojamiento, que de acuerdo a los sitios especializados se consiguen desde 70 dólares la noche, por persona, pero que por lo general las habitaciones de hotel para cuatro personas rondan los 250 dólares por noche.
Las entradas al mundial se venden por paquete. El más económico ofrece, además de un único partido, una cena al estilo callejero, servicio antes y después del partido, estacionamiento y un obsequio conmemorativo, y sale 950 dólares por persona. La opción más cara, llamada “Salon Pearl”, tiene un costo de 4.950 dólares por asistente. Todo ello teniendo en cuenta que se vaya a presenciar partidos de la fase de grupos. Si se va en octavos, cuartos, semis o la misma final, los precios cambian drásticamente.
De este modo, Brancatelli debería pagar, como mínimo, 4.000 dólares en pasajes aéreos, 2.800 dólares en alojamiento y 3.800 dólares en entradas, por un total de 10.600 dólares, equivalente a unos 3 millones de pesos al tipo de cambio actual. Todo ello, sin contar gastos, alimentos y traslados.
Fuente Realpolitik