Hubo sorpresa entre los vecinos de un barrio privado donde se detectaron al menos 16 conexiones eléctricas clandestinas. Dicho de otra manera: se “garroneaba” la luz de manera ilegal.
El hallazgo por parte de Edenor derivó en el inicio de una catarata de denuncias penales contra los vecinos de la zona para que la Justicia investigue el delito de fraude contra la empresa.
El hecho sucedió en el country Los Pingüinos, ubicado en el kilómetro 30 del Acceso Oeste, en la localidad de Ituzaingó.
La empresa, como principal damnificada, además de realizar la denuncia se presentó como querellante para impulsar la investigación y que se condene a los presuntos culpables.
[R][R] COMUNICADO: Realizamos 16 denuncias penales por robo de energía en un barrio privado de Ituzaingó, kilometro 30 del Acceso Oeste, provincia de Buenos Aires. La presentación judicial es por la detección de 16 viviendas con diferentes fraudes eléctricos. (…) pic.twitter.com/yxXVWZF3TS &- Edenor Clientes (@EdenorClientes) January 8, 2021
Las denuncias quedaron a cargo de la Unidad Fiscal de Investigación Nº 1 de Ituzaingó que investiga a los vecinos del barrio, quienes ya habrían sido identificados, por manipular la red eléctrica para obtener luz gratis.
Edenor calificó la situación como “desafortunada” y sostuvo que lamentablemente encuentran este tipo de conexiones en formas reiteradas.
Un hecho de similares características sucedió en mayo de 2020, cuando se identificaron 31 casos en 13 barrios repartidos dentro de Nordelta. En esa ocasión fueron los barrios Islas Del Golf, Los Castores, Barrancas del Lago, Las Tipas, entre otros del exclusivo distrito, los que accedieron a la red de forma ilegal.
Desde la compañía, recientemente adquirida por los empresarios Daniel Vila, José Luis Manzano y Mauricio Filiberti, sostuvieron que este tipo de conexiones se intensificaron al inicio de la pandemia por las restricciones de movilidad y la dificultad de los operadores para hacer los controles presenciales en las distintas zonas.
También resultó un factor determinante el cierre de los juzgados y tribunales por la cuarentena, que evitó que las denuncias por defraudación avancen en la justicia con la celeridad que pretendían.
Ante lo sucedido, Edenor procedió a adecuar los medidores de los vecinos que registraban un consumo mucho menor al real. Afirmaron que una vez normalizada la red se recuperaron 314.00 kwh que equivalen a $2.700.00.
La manipulación de la red pública para el robo de energía es un delito federal que prevé penalidades que van desde multas elevadas hasta la cárcel.