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Por Luis Gasulla
Una de las funcionarias apuntadas por Cristina como que «no funciona» avaló la teoría del Lawfare y se abrazó al Instituto Patria.
«¡Qué hijos de puta! No se puede creer todo lo que estás pasando». El fin de semana de abril del 2019, Ricardo Lorenzetti decidió suspender su tradicional viaje a su lugar en el mundo, Rafaela, provincia de Santa Fe, para invitar a cenar al fiscal Carlos Stornelli, a la futura ministra de Justicia de los Fernández y otro integrante de Comodoro Py. El objetivo era hacerle saber al denunciado fiscal de la Causa Cuadernos que contaba con la solidaridad de referentes históricos de la justicia que ponían las manos en el fuego por su honestidad.
Marcela Losardo no mencionó la palabra Lawfare que ya se escuchaba en programas de televisión del periodismo militante de C5N o en extensas notas del portal de Horacio Verbitsky. Tampoco estaba de acuerdo con la idea de «perseguidos políticos» que repetiría hasta el cansancio Cristina Fernández de Kirchner en su libro «Sinceramente», una idea de su futuro candidato presidencial, Alberto Fernández.
Los comensales escucharon al fiscal Stornelli que estaba emocionado por el respaldo en el momento en que los zócalos del canal de C5N se llenaban con la palabra «Extorsionelli» y que el supuesto chacarero Pedro Etchebest rompía el silencio desde Miami con Gustavo Sylvestre. Sin embargo, la desconfianza reinaba en el ambiente. ¿Era un respaldo o querían saber algo más? Losardo, de excelente relación con el integrante de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, criticó la persecución mediática contra el fiscal de la Causa Cuadernos y lo alentó a seguir investigando al poder, sea quien sea. Losardo gozaba de un prestigio entre la «familia judicial» pues no se la consideraba contaminada por la corrupción ni por la ideologización de la justicia militante de los seguidores de Alejandra Gils Carbó.
Durante el primer año de gestión de Alberto Fernández, Losardo se mantuvo en silencio ante la risueña teoría del Lawfare y la persecución macrista a la oposición. ¿Cómo lo avalaría si ella había acompañado a su socio y amigo político, Alberto Fernández, cuando criticaba la corrupción de Cristina Kirchner y denunciaba el pacto con Irán? ¿Cómo cambiar el discurso después de respaldar a jueces y fiscales que se animaron a investigar a la corrupción kirchnerista y meterse con la Patria Contratista?
El hilo de Twit de Losardo tras un ataque furioso del kirchnerismo
Tal como anticipó este portal, Losardo estuvo apuntada por Cristina Kirchner desde el primer momento. A ella le dirigió el mote de «funcionarios que no funcionan». El 16 de agosto publiqué que, en la intimidad de Recoleta, Cristina Kirchner insultaba a Losardo por su supuesta inacción ante el avance de las causas judiciales en su contra.
Fuente Periodismo y Punto
