Para entender lo que se está debatiendo en torno de la deuda pública tras el discurso del Presidente Alberto Fernández, hay que remitirse a las cifras oficiales.
Tras el derrumbe de la convertibilidad y la cesación de pagos, la deuda pública (interna y externa) pegó un fuerte salto: a fines de 2001 el endeudamiento público era de US$ 141.300 millones. Durante la gestión K, tras el canje de 2005 pasó a 125.400 millones pero luego fue subiendo: a fin de 2015, estaba en US$ 240.665 millones: U$S 86.395 millones más.
Ese aumento de la deuda se produjo en medio de una mayor actividad económica luego del derrumbe de 2001/2002 y por eso, en relación al tamaño de la economía (PBI), fue bajando del 80,5% en 2005 hasta alcanzar un piso del 38,9% en 2011. Pero luego, con el estancamiento de los años siguientes, y en medio de una fuerte salida de capitales, subió al 52,6% a fines de 2015.
Lo mismo pasó en relación a las exportaciones, fuente de ingreso de dólares. Por el boom de los precios internacionales, en 2005 la deuda era del 141% y se redujo al 110% en 2011, para subir al 212,6% en 2015.
Otro dato es que durante los gobiernos de Cristina Kirchner, la deuda aumentó fundamentalmente en pesos, en especial con el Banco Central y organismos públicos, como ANSeS. En 2015, la deuda en moneda extranjera era del 36,4% del PBI.
En los 4 años de Mauricio Macri la deuda pública aumentó en US$ 82.400 millones: pasó de U$S 240.665 millones a US$ 323.065 millones.
Con Macri, la deuda creció en moneda extranjera ( en 2019 llegó al 76,1% del PBI) , y en especial con el FMI. Con relación al PBI, la deuda tuvo un leve crecimiento en 2016 y 2017, para dispararse al 90,2% por la recesión, la devaluación del peso y la salida de capitales. Y respecto de las exportaciones, trepó al 314,1%.
Durante 2020, a pesar del canje acordado con los acreedores ( no hubo quita de capital), la deuda pública nacional creció en U$S 13.022 millones. Pasó de US$ 323.065 millones a U$S 336.087 millones. Y en términos del PBI llegó a la friolera del 100%. Nuevamente, y en medio de la pandemia, el BCRA fue el principal financiador de la mayor toma de deuda.
En todos los casos, los niveles de endeudamiento público no incluyen las deudas de las provincias ni las del Banco Central.
En tanto, el valor del dólar oficial y los dólares alternativos se fueron “por las nubes”. En 2001 un peso valía un dólar, en diciembre de 2010, el dólar oficial cotizaba a $ 4. A fines de 2015 a $ 13,40 – con un dólar paralelo, y en 2019, ya con cepo, cerró a $ 63. Ahora el oficial ronda $ 95, más el recargo del 30%, y el 35% como anticipo de Ganancias, mientras los dólares “alternativos” rondan los $ 145/150.
En agosto del año pasado, el Presidente del Banco Central, Miguel Pesce reconoció que “a Argentina tiene dentro de su territorio US$ 170.000 dólares billetes”. Otro tanto está en cuentas del exterior, en billetes, en bonos, acciones u otras inversiones.
Fuente Clarin