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El alerta se disparó en Miami, Estados Unidos. Un envío postal que había partido desde Lima, Perú, con destino a Mar del Plata, había despertado sospechas en los agentes migratorios que escanearon la encomienda. Al examinarlo encontraron una extraña sustancia marrón. Los análisis confirmaron que eran cuatro kilos de N,N-dimetiltriptamina (DMT), una potente droga alucinógena conocida como “molécula de Dios”.
Ese fue el primer paso para frustar el envío. En Mar del Plata lo esperaba un hombre de unos 60 años que se promociona en las redes sociales como “terapeuta holístico” y ofrece “ceremonias con plantas maestras”, según detallaron a Clarín fuentes de la investigación. En sus perfiles virtuales aseguraba tener conocimientos de “reiki, ceremonias y chamanismo”, entre otros servicios.
La información sobre encomienda fue recibida en Argentina por la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR), a través de un correo electrónico enviado por el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos.
Parte de los elementos secuestrados dentro de la encomienda. Fue entregada de forma controlada.
Así se inició una investigación encabezada por el fiscal Diego Iglesias, titular de la PROCUNAR, y Daniel Adler, fiscal federal de Mar del Plata. Con los datos recibidos desde EE.UU, lograron identificar al destinatario de la encomienda y a su pareja, una mujer que en sus redes sociales también asegura estar dedicada al “camino de la sanación con plantas maestras”.
Los cruces de datos migratorios confirmaron que ambos sospechosos registran entre tres y seis vuelos por año hacia Chile, Perú, Panamá (país por el que también había pasado la encomienda luego de partir de Lima y antes de llegar a Miami), Uruguay, Brasil, España y Bolivia.
Tras recolectar datos y solicitar intervenciones telefónicas, los investigadores decidieron realizar una entrega vigilada de la encomienda. El paquete original fue trasladado desde Miami en un vuelo de Aerolíneas Argentinas. Al llegar a Ezeiza, fue entregado a personal de la Dirección General de Aduanas (DGA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
Según señalaron fuentes del caso, el contenido original –valuado en más de 500 mil dólares– fue reemplazado por otro para realizar la entrega. El destinatario de la droga fue detenido y le secuestraron más cantidad de DMT.
Potente alucinógeno
La Ayahuasca es una bebida con propiedades psicodélicas obtenida por la cocción de plantas de la selva amazónica. Tradicional de los pueblos indígenas de Sudamérica y tomada muchas veces en ceremonias, este preparado se asocia con visiones muy vívidas.
La sustancia que está detrás de las alucinaciones es el DMT (N,N-dimetiltriptamina). Conocido popularmente como “molécula de Dios”, se trata uno de los compuestos psicoactivos más potentes que existen.
Un equipo de investigadores “entró” en el cerebro para entender cómo tomar DMT afecta la conciencia humana al alterar significativamente la actividad eléctrica del órgano. El estudio, publicado en 2019 por Scientific Reports, fue el primero en mostrar los cambios en las ondas cerebrales producidos por el potente psicodélico durante la vigilia y podría ayudar a explicar el por qué de las intensas imágenes y experiencias inmersivas de “soñar despierto”.
“El DMT es un psicodélico particularmente intrigante. La intensidad visual y la profundidad de la inmersión producida por las altas dosis de la sustancia parecen estar en una escala superior a lo que se informa con otros psicodélicos más ampliamente estudiados, como la psilocibina o los ‘hongos mágicos’, dijo en un comunicado el coautor del estudio Robin Carhart-Harris, jefe del Centro de Investigación Psicodélica del Imperial College de Londres.
A dosis altas, la experiencia a menudo se caracteriza por una sensación de entrar en otro mundo o dimensión, aparentemente tan real como el presente. No es raro que las personas describan encuentros con entidades o presencias conscientes dentro de este otro mundo percibido. Junto con las fuertes alucinaciones, tanto con los ojos abiertos como cerrados, pueden producirse sensaciones cercanas a la muerte.
LM
Fuente Clarin
