Fue uno de los sectores estrella. Y en plena pandemia, resistió como pocos el impacto de las restricciones gracias al uso del home office, el home banking y los cajeros. Pese a esas ventajas, la rentabilidad de los bancos volvió a retroceder en el primer trimestre del año por el impacto de la inflación, tasas reguladas y medidas regulatorias.
Según el Banco Central, las entidades financieras registraron una suba del 0,9% anual en febrero en sus Resultados Operativos sobre Activos (ROA) y del 6,1% en relación al patrimonio neto (ROE). Si bien representa una mejora frente a enero, el primer bimestre fue inferior a todos los trimestres del 2020 y marzo no modificaría la tendencia, ya que en el sector esperan un panorama similar.
El dato refuerza un escenario de menores utilidades que viene dándose desde el segundo trimestre del año pasado, cuando el sector financiero empezó a aplicar el ajuste por inflación en sus balances. “La inflación hace más difícil a que los bancos mantener el valor de su patrimonio, con tasas máximas y mínimas sin cambios”, dijo a Clarín Marcelo de Gruttola, vicepresidente y analista senior de Moody’s.
En abril, la agencia calificadora mejoró la nota de los bancos argentinos al cambiar su perspectiva desde “negativa” a “estable”, pero también advirtió que a mediano plazo siguen afectados por desequilibrios, con una inflación esperada del 50% en 2021, ya que la política monetaria expansiva en respuesta a la pandemia sumó “nuevas presiones monetarias e inflacionarias”.
En ese escenario, la actividad financiera enfrentó una compresión de márgenes en el arranque de este año por el impacto de las tasas reguladas. Desde 2019, cuando la tasa de referencia se ubicaba en torno al 60%, el Banco Central la fue reduciendo hasta llegar al actual 38%, un nivel inferior a la suba de precios prevista por economistas y consultoras, quienes ya dan por fracasada la meta oficial del 29%.
Según el informe oficial sobre bancos, el margen financiero del sector subió al 11,5% del activo en los últimos 12 meses desde febrero. En cuanto a los ingresos, los resultados por títulos valores alcanzaron 8,7% del activo y los intereses por préstamos 8,1%. También sumaron recursos las primas por pases, diferencias de cotización y ajustes de partidas con CER. Y del lado de los egresos los depósitos siguieron en 9%.
Dentro de los títulos valores, las Leliq (Letras de Liquidez) y los bonos CER son uno de los principales instrumentos que le permiten a los bancos sostener una rentabilidad aún positiva.
Los pases pasivos (Leliq y pases) crecieron un 76% en los últimos 12 meses, pero el Gobierno busca reducirlos por la bola de intereses que genera, con una emisión mensual del orden de los $ 80.000 millones.
Los bancos toman los fondos de sus clientes y se los prestan al Central a cambio de una tasa del 38% nominal por las Leliq (45,44% efectiva) y de entre el 32 y 36% por los pases pasivos a 1 y 7 días. Un rendimiento que está siendo afectado por la inflación en un marco de tasas estables. “No es lo mismo cobrar 60% que 38%”, reconocen en un banco de primera línea.
Menos crédito al sector privado
Los límites en las tasas también repercuten en un spread que es visto como “ilógico” en el sector. Es que mientras las entidades reciben un 36% de interés por los adelantos de cuenta corriente, pagan 37% por los plazos fijos. En ese escenario, el crédito total al sector privado registró una baja anual del 2,6% real en febrero y los depósitos totales acumularon un incremento de 13,4%, según el BCRA.
“La actividad de intermediación financiera continuó mostrando un desempeño relativamente débil en el segundo mes del año, en parte por factores estacionales”, señaló el informe. Y agregó que “en febrero las fuentes de recursos más relevantes para el conjunto de entidades financieras fueron la reducción del crédito al sector privado, y, en menor medida, de la liquidez en sentido amplio”.
Los préstamos en pesos al sector privado, en cambio, aumentaron en términos reales impulsados por documentos y, en menor medida, por tarjetas. Así todo, el sector financiero enfrentó menores ingresos por comisiones en tarjetas a los comercios, que este año se redujeron al 1,8% desde el 3% previo. Pero ahora los bancos anunciaron una segunda suba de comisiones a los particulares.
“Los resultados del 2020 fueron relativamente buenos en función del contexto de pandemia, pero vemos en los últimos años una compresión de márgenes por ajuste de inflación y la regulación de tasas sobre depósitos, préstamos y créditos a las pymes. Por eso, nuestra perspectiva es que continúe el achicamiento de márgenes”, señaló de Gruttola.
En el Central, en tanto, atribuyen la menor rentabilidad del sistema financiero al impuesto que aplica la Ciudad a las Leliq, que redujo en 1,5 puntos la tasa. Los pasivos remunerados representan hoy entre un 25 y un 30% del activo de los bancos.
“El BCRA tomó medidas orientando la rentabilidad del sistema financiero a la mejora de la prestación de servicios, la bancarización y la inclusión financiera”, señalaron desde la entidad.
Según los datos del organismo, los gastos de administración (6,5% del activo) y los cargos por incobrabilidad (1,5% del activo) fueron los más egresos más relevantes. “Los bancos pueden reducir los efectivos mínimos a partir de mejorar la eficiencia de cajeros y el aumento de las transferencias electrónicas, también cuando otorgan préstamos a personas que nunca habían recibido un crédito”, dicen en el Central.
NE
Fuente Clarin