Miembros de la comunidad etíope de Israel protestaron frente al Ministerio del Interior en Jerusalén este año.
El Tribunal Superior de Justicia no escuchó adrede un pedido que impedía que el gobierno trajera a etíopes elegibles para ser ciudadanos israelíes. Esto allanaría el camino a miles de refugiados de dicho país a que lleguen en breve.
En noviembre pasado, el gobierno aprobó un plan para permitir el ingreso de 9.000 etíopes con parientes de primer grado en Israel bajo la Ley del Retorno. Pero este esfuerzo se bloqueó por el Centro de Política de Inmigración de Israel, de derecha, que solicitó al tribunal con la razón de que los etíopes no eran judíos ni descendientes directos de judíos.
Esta semana, el tribunal decidió que la resolución gubernamental no se sujetó a revisión judicial. Esto llevó a que el centro de Política de Inmigración nacional retire su petición y el tribunal eliminó la orden judicial sobre el plan.
“Estos inmigrantes esperaron sin razón y quedaron separados de sus familias, sus padres, sus hermanos, sus hijos y más. La guerra en Etiopía y la pandemia del coronavirus empeoraron su situación. Y ha llegado el momento de traerlos de vuelta a Israel”, dijo Tamano-Shata en un comunicado.
Y agregó: “Todos los israelíes son hermanos. Como prometí, seré un ministro para todos. Lucharé para traer judíos de Ucrania junto con la inmigración etíope y de cualquier parte de la diáspora donde alguien quiera emigrar a Israel”.
La decisión final y los comentarios se produjeron un día después de que Tamano-Shata acusar a sus colegas ministeriales de hipocresía. Actuó así porque ellos lucharon mucho más para traer a los refugiados ucranianos elegibles para la ciudadanía que huían de la guerra que para traer a los etíopes con circunstancias similares.
Fuente Aurora