Altos miembros de la Familia Real se congregaron en la icónica catedral para el servicio, aunque la Reina estuvo ausente después de anunciar el jueves por la noche, hora local, que se había sentido “incómoda” durante las actividades del jueves y que no asistiría al servicio. La monarca ha enfrentado problemas de movilidad en los últimos meses y solo ha aparecido en funciones públicas muy selectas, con sus hijos y otros miembros de la realeza que la representan.
Otra ausencia notable del servicio es la del Príncipe Andrew, quien reveló el jueves que había dado positivo por Covid-19. El tercer hijo de la Reina no formó parte del desfile de cumpleaños de su madre el jueves, ya que se alejó de los deberes públicos a raíz de las denuncias de agresión sexual por parte de Virginia Guiffre. El príncipe resolvió el caso fuera de los tribunales en febrero.
En St. Paul’s, el príncipe Harry y Markle, quienes eran todo sonrisas mientras hablaban con el clero afuera del edificio antes de entrar, se sentaron en la segunda fila con amigas cercanas, las princesas Beatrice y Eugenie y sus esposos.
También estuvo presente en el servicio de Acción de Gracias el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, y su esposa Carrie, cuya aparición, junto con algunos vítores, provocó considerables abucheos de la multitud afuera. El primer ministro ha estado involucrado en una serie de escándalos en los últimos meses, en torno a fiestas en el número 10 de Downing Street durante el período de cierre del país.
Fuente Ambito