Por Alexei Navikov
Los hechos recientes, una vez mas confirman que la relación entre Irán y el régimen de Maduro en Venezuela no es solo una relación comercial, si no que trasciende a lo militar, el terrorismo y el narcotŕafico. Las acciones tanto de Irán como de Maduro ahora, y antes Chávez, según la información de inteligencia manejada por diferentes agencias del mundo, comprueban la aspiración iraní de usar a Venezuela como plataforma para lanzar ataques terroristas contra varios paises del continente americano, y al mismo tiempo lograr su aspiración de poseer armas nucleares. Y de acuerdo a la aspiración en ese sentido, manifestada varias veces en público por el narco criminal Hugo Chávez, el que Venezuela pueda también posee tales armas.
En un convenio firmado entre Chávez e Irán, se comenzaron a construir aviones no tripulados, drones, con tecnología iraní, capaces de portar y lanzar misiles, de los cuales ya Venezuela posee varios operativos. La fábrica de estos drones se encuentra ubicada en las instalaciones de la Compañía Anónima de Industrias Militares, CAVIM, ubicada en un sitio estratégico, fuera de la vista del público, en la ciudad de Maracay, capital de un estado central venezolano, donde además se encuentran 2 bases aéreas de importancia. En la imagen se identifica la ubicación de CAVIM, donde además se encuentra la fábrica de fusiles Kalashnikov, y de las municiones que utiliza la Fuerza Armada Venezolana.
Si consideramos el hecho de la dotación a Venezuela por parte de Irán de misiles de mediano alcance, la información sobre, hasta ahora, de al menos dos sitios en Venezuela donde se estaría enriqueciendo uranio y torio con fines nucleares, no sería descabellado suponer que esos misiles iraníes que hoy posee Venezuela, pudieran ser armados con pequeñas cargas nucleares y con ellos atacar objetivos estratégicos en Colombia y Centroamérica, sitio este último donde se ubica, por ejemplo, el Canal de Panamá, causando tal ataque una debacle a la economía mundial y un daño estratégico-táctico a las fuerzas navales norteamericanas que hoy pueden pasar del Pacífico al Atlántico gracias a la ampliación que recientemente se hizo del mencionado canal.
Varios expertos en inteligencia piensan que en cualquier momento en el mediano plazo puede presentarse un ataque iraní en las regiones que menciono, usando a Venezuela como plataforma. En este punto debo referirme muy especialmente al avión de Mahan Air recientemente “detenido” en Argentina.
Venezuela posee en su noroeste una península llamada Península de Paraguaná. A dicha península llegó el primer vuelo de Mahan Air transportando hombres y equipos iraníes donde la inteligencia de varios paises han reportado la construcción de una base de radares y lanzamiento de misiles operada por efectivos militares venezolanos e iraníes. Es una península grande, extensa, y se reporta la presencia de numerosos hombres que hablan idioma árabe, no español, fuertemente armados. Esta península esta en el territorio del venezolano Estado Falcón, y, oh, sorpresa, la gobernadora chavista a quién correspondió recibir a ese vuelo, y lo que en él se transportó, era Stella Lugo Betancourt, embajadora de Venezuela en Argentina desde justo tres semanas antes del suceso con el avión de Mahan Air con bandera y matrícula venezolana.
Nada es casual con Irán, Venezuela y Argentina. Estaremos atentos al resultado del trabajo de inteligencia en desarrollo, e informaremos los nuevos “detalles”.