Era tomá y hacelo… A los 18 minutos del primer tiempo, Boca tuvo una situación clarísima para ponerse en ventaja ante Corinthians, en el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores. Luego de un jugadón de Exequiel Zeballos, Darío Benedetto desperdició lo que era el 1-0: pero definió de lujo y la tiró afuera. Aunque tuvo revancha enseguida, sin embargo no la aprovechó: a los 31′ estrelló un penal en el palo.
El penal del Pipa: fue palo (Reuters).
En la primera de las dos claras, el Pipa quiso ponerle el moño a una gran acción del Changuito. A pura velocidad y con fuerza, el extremo dejó tirado en el piso a Lucas Piton y sacó un preciso centro para el punta. ¿En qué falló el punta? Completamente solo dentro del área de Cassio, Benedetto le dio con una tijera desde el piso y el remate no fue ni al arco. Sin ningún marcador cerca, tenía tiempo para buscar una definición menos lujosa pero más efectiva: podía hasta pararla para intentar un mejor remate.
La definición de Benedetto.
El delantero, que en la previa hizo una una fuerte arenga, se podría haber sacado la espina unos minutos después… Fue él quien se hizo cargo de penal que sancionó Andrés Matonte, luego de chequear en el monitor del VAR la agresión de Raul Gustavo a Pol Fernández. Desde el punto penal, Benedetto no anduvo con vueltas: le dio con alma y vida, pero su derechazo terminó en el poste.
Muy activo durante el PT, el ex Elche incluso tuvo una más: un remate cruzado a los 41 minutos. La Bombonera, para bancarlo tras sus dos fallas, se vino abajo y le dedicó una ovación.
Las chances de Benedetto
Fuente OLE