
Durante su estadía en el país, Shinzo Abe, que entonces ostentaba el cargo de una de las principales economías mundiales, defendió la importancia de fortalecer un “sistema de comercio exterior libre y justo”, una de las directrices de su último gobierno.
La cumbre del G20 en Argentina estuvo centrada en las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, un tema sensible para Japón debido a sus vínculos comerciales con el primero y a las tensiones regionales que Tokio experimenta con Pekín.
En el campo bilateral, la cumbre del G20 terminó por afianzar una buena sintonía entre Abe y el entonces presidente Mauricio Macri que se plasmó en acuerdos comerciales para la exportación de carne y frutas desde la Patagonia a Japón y en la decisión de elevar la relación a socio estratégico.
Japón recibió el mandato de Argentina para la presidencia de la cumbre siguiente, en octubre de 2019 en la ciudad de Osaka.
Fuente Ambito