Muchas veces caemos en el error de que nuestra salud está ligada únicamente al ejercicio físico o a una dieta balanceada. Y también es muy necesario ejercitar nuestra mente. Las neuronas en nuestro cerebro van desarrollando la capacidad de adaptarse a los cambios y las nuevas conexiones neuronales. Este cambio, conocido como neuroplasticidad, permite la modificación de hábitos o de aprender nuevas habilidades. De esta forma se pueden reducir los efectos de patologías como Parkinson, Alzheimer, dislexia o insomnio.
Fuente Ambito