Los talibanes entregaron a EE. UU. a un veterano de la Marina estadounidense secuestrado hace más de dos años, a cambio de un aliado del régimen detenido por narcotráfico, confirmó el ministro afgano de Exteriores.
Los talibanes anunciaron la liberación de Mark Frerichs, considerado el último prisionero de Estados Unidos en manos del grupo islamista en Afganistán, en un intercambio de prisioneros con el narcotraficante Haji Bashir Noorzai, un importante aliado de los fundamentalistas.
El ministro interino de Exteriores de Afganistán, Amir Khan Muttaqi, anunció en una rueda de prensa en Kabul que Mark Frerichs, que había sido secuestrado en 2020, fue intercambiado por Haji Bashar Noorzai, encarcelado durante 17 años por Estados Unidos, en su base naval de Guantánamo, por contrabando de heroína.
“Hoy, Mark Frerichs fue entregado a Estados Unidos y Haji Bashar nos fue entregado en el aeropuerto de Kabul”, dijo Muttaqi en una conferencia de prensa en la capital afgana. El intercambio se produjo “tras largas negociaciones” y Frerichs fue entregado a una delegación estadounidense, añadió.
“Estados Unidos hizo bien en iniciar la negociación y creemos que ese tipo de pasos allanarán el camino para más logros y el desarrollo (del país). Probamos y probaremos que nadie usará suelo afgano contra nadie”, afirmó Muttaqi en su comparecencia.
Ingeniero civil contra aliado talibán, detenido por narcotráfico
El veterano de la Marina estadounidense trabajaba en Afganistán como ingeniero civil en proyectos de construcción cuando fue secuestrado, según el Departamento de Estado estadounidense.
El pasado enero, cuando se cumplían dos años de su captura, el presidente estadounidense, Joe Biden, había exigido a los talibanes la liberación de Frerichs, advirtiendo que no se produciría ningún reconocimiento internacional si su compatriota no era liberado.
Poco después del anuncio talibán, la familia de Frerichs confirmó su liberación.
En la rueda de prensa de este lunes (19.09.2022) en Kabul, compareció junto al ministro el preso liberado por Estados Unidos, Haji Bashir Noorzai, un importante aliado de los talibanes desde los inicios de la formación del grupo insurgente en 1994, convirtiéndose en uno de sus principales donantes, muy próximo al fundador del grupo mulá Mohamed Omar.
Noorzai había permanecido “17 años y seis meses”, como él mismo recordó, bajo arresto. “Hubiese sido imposible para mí haber sido liberado de una pena de por vida sin la firme determinación y esfuerzos del Emirato Islámico (el Gobierno talibán)”, aseguró Noorzai, que reclamó al mundo que dialogue y negocio con los islamistas.
Haji Bashir Noorzai (c) pasó casi dos décadas detenido por Estados Unidos en la prisión instalada por EE. UU. en su base naval en Guantánamo (en territorio ocupado en Cuba).
Noorzai, que llegó a aparecer en la lista de los más buscados por Estados Unidos, fue detenido en abril de 2005 mientras viajaba a EE. UU. y condenado en 2009 a cadena perpetua por introducir en este país heroína por valor de 50 millones de dólares.
El detenido dirigía supuestamente desde comienzos de la década de los 90 una organización internacional dedicada al tráfico de heroína.
El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, dijo el lunes a la agencia AFP que Noorzai no ocupaba ningún cargo oficial, pero que “proporcionó un fuerte apoyo, incluidas armas”, cuando el movimiento islamista surgió en la década de 1990.
Muttaqi aseguró hoy que ahora los “problemas restantes” con Estados Unidos y la comunidad internacional también podrán resolverse “a través de la negociación”.
El reconocimiento del Gobierno talibán, que tomó el poder en Kabul el 15 de agosto de 2021, es uno de los principales obstáculos a los que se enfrentan los islamistas, una situación que impide el acceso a ayuda internacional o a sus fondos en el extranjero.
rml (efe, afp, ap)
Fuente DW