La televisión estatal iraní afirmó hace más de una semana que 41 personas han fallecido por la represión, pero la ONG Iran Human Rights, con base en Oslo, eleva la cifra a 92.
El líder supremo de Irán, Ali Khameneí, apoyó este lunes a las fuerzas de seguridad que han reprimido las protestas por la muerte de Mahsa Amini hace más de dos semanas, en medio del blindaje de las universidades con antidisturbios para evitar nuevas movilizaciones.
Tras dos semanas de silencio, el ayatolá afirmó que la muerte de la joven es “desoladora”, pero calificó las protestas que se han desencadenado por ello como «no normales» y “planeadas» por Estados Unidos e Israel.
«La reacción adecuada no era que algunos crearan inseguridad, incendiando mezquitas, bancos y vehículos particulares», afirmó el líder en una visita a la Universidad de Oficiales de las Fuerzas Armadas, en una muestra de apoyo a las fuerzas de seguridad.
Khameneí aseguró que las protestas en las que se grita «Mujer, vida y libertad” estaban «planeadas» y señaló directamente a Estados Unidos e Israel, según su cuenta de Twitter.
«Declaro públicamente que los recientes disturbios y agitaciones fueron una conspiración diseñada por EE.UU; el usurpador y falso régimen sionista; sus mercenarios y algunos iraníes traidores que viven en el extranjero y les ayudaron», dijo el religioso.
«Quieren un Irán como el de la era Pahlavi (el último sha), que obedecía sus órdenes como una vaca lechera. Para ellos no se trata de la muerte de una mujer joven o el velo», añadió.
Además defendió a la Policía y a los basijis (milicias paramilitares leales al régimen iraní) «por hacer su deber», aunque la ONU afirmó que llegaron a usar munición real para reprimir las protestas. «La Policía, los basijis y el pueblo de Irán son los oprimidos», dijo.
Khameneí dio su discurso en una universidad -militar- en un momento en que las facultades se han convertido en el centro de las protestas. Así, algunas de las principales universidades de Teherán amanecieron este lunes con una fuerte presencia de policías antidisturbios, al igual que algunas zonas del centro de la capital.
Las universidades iraníes reabrieron el pasado sábado tras una semana sin clases presenciales, solo con clases «online», una de las medidas que tomaron las autoridades para atajar las protestas de lo jóvenes iraníes, junto con los cortes de los servicios de internet.
Pero el mismo sábado volvieron las protestas a varios de los centros como fue el caso de la Universidad Allame Tabatabai de Teherán, donde los estudiantes pidieron la liberación de algunos compañeros que habían sido detenidos días antes.
Pero en otros centros las mujeres se quitaron y ondearon sus velos, según vídeos compartidos sin verificar por activistas al grito de «No queremos la República Islámica», unas protestas que se prolongaron el domingo.
Al grito de «Mujer, vida y libertad» miles de jóvenes han estado protestando contra las leyes que imponen el velo obligatorio y pedido más libertades. Además, eslóganes como «Muerte al dictador», en referencia al líder supremo de Irán, Ali Jameneí, y «No queremos la República Islámica» han ido ganado protagonismo.
Esas movilizaciones han sido fuertemente reprimidas por las fuerzas de seguridad y además hay fuertes cortes de internet. La televisión estatal iraní afirmó hace más de una semana que 41 personas han fallecido, pero la ONG Iran Human Rights, con base en Oslo, eleva la cifra a 92.
Con información de EFE
Fuente Aurora