Una investigación de Amnistía Internacional señala que durante las manifestaciones que siguieron a la muerte de Mahsa Amini murieron niños y hubo cientos de heridos bajo fuego policial
Al menos 82 personas han muerto desde el 30 de septiembre por la represión de las protestas en la ciudad de Zahedán, en el sureste de Irán, informó este jueves Amnistía Internacional.
“Las fuerzas de seguridad iraníes mataron ilegalmente al menos a 66 personas, incluidos niños, e hirieron a cientos más después de abrir fuego” contra manifestantes, transeúntes y fieles, tras la oración del viernes el 30 de septiembre, según esta ONG.
“Desde entonces, otras 16 personas han muerto en incidentes separados en Zahedán como parte de la actual represión de estas protestas”, agrega Amnistía.
Irán es escenario de manifestaciones después de que Mahsa Amini, una kurda iraní de 22 años, muriera el 16 de septiembre tras su detención en Teherán por la policía moral, que le reprochaba haber infringido el código de vestir que obliga a las mujeres a llevar velo.
Amnistía afirma que las fuerzas de seguridad dispararon “munición real y gas lacrimógeno” contra manifestantes congregados ante una comisaría de policía, el 30 de septiembre en Zahedan
“Las pruebas reunidas por Amnistía Internacional muestran que la mayoría de las víctimas resultaron alcanzadas por balas en la cabeza, el corazón, el cuello y el torso, revelando una intención clara de matar o de herir de gravedad”, afirma la ONG, que precisa que los disparos procedieron de la “azotea” de la comisaría.
Las fuerzas de seguridad iraníes dispararon contra los manifestantes y mataron a decenas de personas la semana pasada en Zahedán, ciudad de la provincia de Sistán Baluchistán, en el sudeste de Irán, en momentos en que el país está siendo sacudido por una ola de protestas, acusan varias ONG.
Las protestas contra las muertes en Irán se reprodujeron en otros países
Por su parte, los medios de comunicación cercanos al poder iraní describieron los enfrentamientos de Zahedá -que comenzaron el 30 de septiembre después de la oración del viernes- como un “incidente terrorista” dirigido contra una comisaría de policía y que condujo a la muerte de cinco miembros de la Guardia Revolucionaria, el ejército ideológico del régimen.
Durante el “viernes sangriento de Zahedán”, las fuerzas de seguridad “reprimieron con sangre” una manifestación que estalló después de las oraciones, afirman varias ONG, según las cuales las imágenes de heridos de bala, la política de discriminación y represión de Teherán en la región es reveladora.
– ¿Dónde tuvieron lugar los enfrentamientos? –
Los enfrentamientos tuvieron lugar en Zahedán, principal ciudad de la provincia de Sistán Baluchistán, en el sudeste y cerca de las fronteras con Afganistán y Pakistán.
Sistán Baluchistán es una de las regiones más pobres y hogar de la minoría baluchi, que en su mayoría se adhiere al islam sunita y no al chiísmo dominante en Irán.
Militantes y ONG lamentan desde hace tiempo que la región sea víctima de discriminación por parte del poder religioso chiíta, con un número desproporcionado de baluchis muertos en enfrentamientos con las fuerzas del orden cada año o condenados y ejecutados.
Amnistía Internacional estima que, en 2021, al menos 19% de todos los condenados a muerte eran miembros de la “minoría étnica baluchi, que representa 5% de la población iraní en su conjunto”.
– ¿Cómo fueron los acontecimientos? –
Una manifestación tuvo lugar en Zahedán el 30 de septiembre, después de la oración del viernes, informó a AFP Abdolá Aref, director de la ONG Baluch Activists Campaign (BAC).
Los manifestantes se dirigieron luego a la comisaría para protestar por la violación y gritaron consignas contra el líder supremo iraní, el ayatolá Ali khamenei.
Iraníes, incluidas dos personas vestidas como el ayatolá Ali Khamenei, y el presidente Ebrahim Raisi protestaron contra el régimen en Irán tras la muerte de Mahsa Amini
Algunos lanzaron piedras y las fuerzas de seguridad respondieron abriendo fuego, destacó Aref, señalando que “muchas personas fueron abatidas por francotiradores, incluidas personas que no habían participado en las manifestaciones”.
Las manifestaciones se extendieron por toda la ciudad y se dirigieron contra otras comisarías.
– ¿Cuál es la situación actual? –
Según Aref, la situación en Zahedán regresó a la calma, aunque es posible que se celebren nuevas manifestaciones después de la oración de este viernes.
Sin embargo, numerosas personas fueron detenidas durante las operaciones de represión contra las personas que participaron en las manifestaciones, añadió Aref, aunque precisó que el número exacto de esas detenciones aún no fue aclarado.
(Con información de AFP)