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Por Guido Braslavsky
“Esta todo roto”, dicen en el oficialismo y también en la oposición. Expectativa por el fallo en la causa Vialidad contra Cristina Kirchner.
¿Y si se quedaban viendo el Mundial? A la hora que legisladores de las dos principales coaliciones se despedazaban en el recinto, Marruecos daba la nota ante Canada y se metía en octavos y Croacia-Bélgica, pese al empate, no dejaba de ser un buen programa.
En cambio, lo de la Cámara de Diputados fue este último jueves una sucesión de escándalos que la colocaron en situación de fractura.
“Esta todo roto”, “Va a costar todo más de lo que ya costaba”, decían este viernes a uno y otro lado de la grieta ensanchada en los sucesos del jueves.
Ya la cosa había arrancado mal desde la sesión preparatoria de las 11 de la mañana en la que el Frente de Todos no alcanzó el quórum para reelegir a Cecilia Moreau al frente del cuerpo para 2023. Si el pésimo clima político llevó a esa situación inédita al menos en los 40 años de democracia recuperada, ¿para qué insistir en la sesión especial que estaba citada para un par de horas después?
01/12/2022. A los gritos la oposición reclama en la sesión de este jueves. Foto Lucia Merle
El próximo martes 6 el fallo muy probablemente condenatorio a Cristina Kirchner en la Causa Vialidad tendría también consecuencias. Diputados suele reflejar el estado de la política y lo del jueves quizás haya sido un anticipo. Este fallo y los feriados de jueves y viernes se llevarán la semana que viene sin sesión, pero nada hace pensar hoy en acuerdos más adelante tampoco.
La Cámara baja llegaba raspando con 6 (sino un 5 regular) a sus “calificaciones” de fin de año; una a favor en el boletín de un año malo era que había procesado sin conflicto sus representantes al Consejo de la Magistratura, 2 por el mayoritario Frente de Todos, 1 por el PRO, 1 por la UCR como segunda minoría.
Pero explotó por los aires cuando el oficialismo se plegó a la ofensiva cristinista contra la Corte Suprema. Montada en un fallo judicial cuestionado Cecilia Moreau bajó las designaciones de los cuatro diputados a la Magistratura, y la oposición de Juntos por el Cambio estalló.
Pasos Perdidos si, recinto no
En la jornada del jueves hubo un inusual desfile de los bloques e interbloques por Pasos Perdidos, para sentar posición en conferencias de prensa, ante la imposibilidad de hacerlo en su lugar natural, el recinto.
01/12/2022. Cecilia Moreau, Germán Martínez -jefe del bloque del Frente de Todos, y otros diputados oficialistas, en la conferencia de prensa en Pasos Perdidos. Foto Lucia Merle
Primero fue el fracaso de la sesión de las 11 en que iban a ser ratificadas las autoridades, empezando por la propia Moreau, más los vicepresidentes del cuerpo. El Frente de Todos no logró quórum: apenas sumó a sus habituales aliados rionegrinos (2) y misioneros (2) y neuquino (1). La izquierda, el interbloque federal que preside Alejandro Topo Rodríguez y los liberales tampoco dieron quórum, buscando no mezclarse en ese lío.
En ese mal clima, el Frente de Todos forzó una segunda sesión postergando por nota escrita -a falta del número- la hora de inicio cuando lo reglamentario es sentarse en el recinto con un tiempo estipulado para lograr quórum, según denunció JxC que la dio por “caída”. Pero entró igual después a “pelearla” -casi literalmente- desde adentro.
Hubo un round aparte: los cordobeses schiarettistas del interbloque Federal parecían medir tiempos con los radicales de Evolución que comanda el cordobés -y potencial rival provincial- Rodrigo de Loredo.
“Ellos están desesperados para que nosotros demos quórum, cuando ellos son los que tienen el acuerdo con el kirchnerismo por las universidades”, decían en el bloque cordobés que lidera Carlos Gutiérrez, por las universidades de Saladillo y Río Tercero, promovidas por Evolución dentro de un paquete mayor. “Se niegan a bajar a tratar la creación de la universidad de Río Tercero”, fustigaron luego por twitter oficial del bloque a De Loredo y a otra radical, la riotercerense Gabriela Brouwer de Koning, ferviente impulsora de la universidad en su ciudad.
Después de mucho cavilar, una patrulla con pretensión “neutral” de cinco sobre 8 miembros del interbloque federal se aventuró al recinto que en minutos se convertiría en escenario de batalla entre JxC y el FdT. Gutierrez, Natalia de la Sota, los socialistas Mónica Fein y Enrique Estévez, y Topo Rodríguez, fueron clave para el quórum junto a los 4 diputados de la izquierda. Cuando empezó el griterío, los federales -de ese interbloque no bajaron Graciela Camaño ni Florencio Randazzo- se escabulleron y no volvieron.
Los radicales de Evolución tuvieron también su incomodidad: querían sesionar y sacar adelante el tema universidades. Apenas hubo quórum hicieron punta en el ingreso Emiliano Yacobitti -vicerrector de la UBA, cerebro de ese bloque de radicales rebeldes hacia la conducción Negri-, Danya Tavela y Brouwer de Koning.
En los incidentes que siguieron Evolución se mantuvo al margen y De Loredo cuyo antikirchnerómetro suele arrojar valores de entre “recargado” y “super recargado” estuvo bien alejado del ruidazo que proponían entre otros, Cristian Ritondo y Fernando Iglesias (PRO), Maxi Ferraro y Juan Manuel López (CC), Soledad Carrizo y Karina Banfi (UCR), parte de los airados reclamos a Moreau que casi llega a los golpes cuando el pack de mujeres diputadas del FdT salió en defensa “en clave feminista” de la titular de la cámara.
La sesión se levantó cuando astutamente JxC forzó una votación haciendo moción de orden, sabiendo que no había quórum. Los cruces siguieron hasta hoy fuera del recinto y en las redes sociales.
Fuente Clarin
