La venta mediada por el gobierno suizo marca el final de la caída del banco, que cayó ante una crisis de confianza que amenazó con contagiar a los mercados financieros globales (Foto: Bloomberg)
Otrora un baluarte del sistema financiero global, Credit Suisse Group AG dejará de existir. Tras un fin de semana lleno de conversaciones tensas, UBS Group AG acordó comprar el banco por unos US$3.250 millones, una cifra menor al valor de mercado del atribulado prestamista estadounidense First Republic Bank.
La venta mediada por el gobierno suizo marca el final de la caída del banco, que desplomó ante una crisis de confianza que amenazó con contagiar a los mercados financieros globales.
Durante 166 años, Credit Suisse contribuyó a situar a Suiza como eje de las finanzas internacionales y se enfrentó a los titanes de Wall Street antes de que una sucesión de escándalos, problemas legales y trastornos en la gestión minaran la confianza de los inversores.
Aunque la decadencia se gestó durante años, el final no se hizo esperar. Tras la quiebra del Silicon Valley Bank el pasado fin de semana, Credit Suisse se convirtió rápidamente en un foco de preocupación. Después de que el principal accionista, el Saudi National Bank, dijera el miércoles a Bloomberg Television que “en absoluto” invertiría más en el prestamista, se desató la crisis.
Un respaldo financiero de US$54.000 millones del banco central suizo -cerrado el jueves a altas horas de la noche para calmar el nerviosismo- no se convirtió en el salvavidas que Credit Suisse esperaba. Con el sector bancario del país en peligro, las autoridades suizas intervinieron para empujar a UBS a convertirse en un reticente caballero blanco.
El Gobierno suizo “lamenta que CS no haya sido capaz de dominar sus propias dificultades, pues habría sido la mejor solución”, declaró la Ministra de Finanzas, Karin Keller-Sutter, en una rueda de prensa celebrada el domingo en Berna.
Fuente Bloomberg