Se desconocen los verdaderos motivos de semejante desatino, pero no solo ponen en peligro la fuente laboral, también podrían producir un aumento en un producto esencial, sobre todo entre los mas pobres que no tienen acceso a proteinas. Especialistas aseguran que la gripe aviar no se contagia vía los huevos y son aptos para el consumo.
A pesar de dar negativo de gripe aviar, empresa avícola tiró a la basura 360.000 huevos
Se trata de la avícola Santa Ana, de la provincia de Corrientes, que mostró en las redes sociales cómo se deshizo de la mercadería. A pesar de dar negativo en el test de gripe aviar, el Senasa obligó a descartar esos productos para el consumo.
Una empresa avícola de la provincia de Corrientes publicó un polémico video en el que muestra cómo descartó y tiró a la basura unos 360.000 huevos, por un valor de $7 millones, a pesar del resultado negativo del test de gripe aviar. Las imágenes del derroche de comida se viralizaron en las redes sociales, tras la decisión del Senasa.
En el video, armado por la empresa Avícola Santa Ana, uno de los empleados relata las causas de la decisión y cuestiona al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), por no permitirle poner esos productos a la venta, a pesar de no estar contaminados por la gripe aviar, según las pruebas.
Tiran a la basura 360.000 huevos a pesar de dar negativo de gripe aviar
Y no solo eso, sino que dicha empresa deberá deshacerse de más mercadería ya que el Senasa pidió una tercera toma de muestras lo que no le permite comercializar sus productos. “Nos obligan a otra muestra. Y mantienen la interdicción del establecimiento”, expresó Daniel Encizo, Director General de Avícola Santa Ana luego el pedido del Senasa a la justicia de una tercera muestra, a la prensa.
Por otra parte, el Senasa prohibió el movimiento de la producción ante el pedido de la firma de poder donarlos “Los huevos no constituyen ningún peligro para la salud pública, incluso, de aves infectadas”, apuntó el director de la marca.
En el video, que circuló durante todo el fin de semana en las redes, se ve el procedimiento de descarte de la mercadería. Allí unos 360.000 huevos fueron tirados a la basura a pozos en la tierra, mientras se muestran imp
La avícola denunció en primera instancia el test realizado por el Senasa, que según el organismo había sido positivo, lo que obligaba a Santa Ana a que se sacrificaran las 200.000 gallinas que tienen en producción.
Según denunció la empresa desde un principio, hubo errores en el procedimiento por parte del Senasa. En un comunicado, aseguró que el pasado martes 4 de abril, un funcionario de ese organismo de control sanitario se hizo presente en la empresa y alertó que en ningún momento ingresó a los galpones, ni tuvo contacto con los animales.
Solo dejó un kit para tomar muestras en manos de una Veterinaria de Registro, que para la avícola, “es una profesional que tiene registro de Senasa, certificada en inocuidad de los productos, pero que no tiene capacitación en sanidad, ni mucho menos para tomar muestras”.
Las consecuencias serían la matanza de 200.000 gallinas, la destrucción de más de 15.000 docenas de huevos por día, el cierre una empresa con 40 años de antigüedad y el desempleo de al menos 300 personas, explicó la empresa en un comunicado.
La respuesta de la empresa
A partir de esto, los trabajadores iniciaron una protesta y la empresa presentó un recurso de amparo, al que la Justicia hizo lugar y dispuso una serie de medidas, entre ellas la realización de un nuevo estudio por parte del organismo sanitario. Mientras tanto, la avícola siguió señalando ante los medios que hubo “errores en el procedimiento”. Finalmente el segundo estudio realizado dio negativo.
Cuando el director de la empresa avisó al Senasa que se estaba ocupando toda la capacidad para almacenar las producción, el organismo sanitario no le dio más alternativa que la destrucción, que se comenzó a producir a pesar de que no habría presencia de Gripe Aviar en la planta.
Es decir, el primer operativo ordenado por Senasa implicó enterrar 360 mil unidades, pero los próximos días habrá que hacer lo mismo, porque la capacidad de almacenamiento de la planta avícola está saturada.
“El Senasa mantiene el bloqueo y nos obliga a destruir 360 mil unidades de huevo, que son aptos para consumo, que no implican ningún riesgo y que incluso nosotros propusimos donar”, expresó un trabajador de la empresa, en el video que circuló por las redes sociales en las últimas horas.
Fuente Ambito