Por Julieta Pelcastre
China desarrolla armas nucleares a una “velocidad aterradora”. Podría tener unas 1500 ojivas nucleares para 2035 si continúa expandiendo su arsenal al ritmo actual, indicó el diario The EurAsian Times el 25 de febrero basándose en un informe del Comando Estratégico de los Estados Unidos (STRATCOM) de finales de 2022.
STRATCOM reveló que el arsenal de ojivas nucleares de China superó las 400 en 2022 en una fracción del tiempo calculado, pues dos años antes estimó que contaba con menos de 200 cabezas nucleares, y que el arsenal sería duplicado en un lapso no menor a una década, refiere en Internet CNN.
“Para muchos países como China las armas nucleares son un símbolo de estatus de potencia; esa es la primera complicación”, dijo el 15 de marzo a Diálogo Luis Rodríguez, investigador postdoctoral del Centro de Seguridad y Cooperación Internacional, de la Universidad de Stanford.
Según el Departamento de Defensa de los EE. UU., la República Popular China ha manifestado claramente su ambición de fortalecer su “disuasión estratégica”, y sigue acelerando la modernización, diversificación y expansión de sus fuerzas nucleares.
Esa estrategia busca lograr “el gran rejuvenecimiento de la nación China” para 2049, en una búsqueda decidida por amasar su poder nacional para transformar un sistema internacional más favorable a los intereses del Gobierno chino, precisó el Departamento de Defensa estadounidense.
Silos y reactores
Aunque China mantuvo una fuerza nuclear relativamente pequeña durante décadas, en junio de 2021 imágenes satelitales revelaron que estaba construyendo 120 silos para misiles balísticos intercontinentales en la periferia del desierto de Gobi, refiere la revista estadounidense Foreign Affairs. Además, fue descubierto el desarrollo de otros 110 silos para misiles en la provincia Xinjiang, al noroeste del país, detalló.
Los silos para misiles son estructuras de concreto que almacenan estas armas, y sirven tanto para protegerlos como para lanzarlos, reporta la plataforma británica BBC.
Por otro lado, el diario español El Confidencial reportó que China desarrolla dos reactores nucleares de generación rápida. El primero de ellos está programado para operar en 2023, el segundo en 2026, afirma.
Aun cuando China asegura que los reactores son para generar energía civil, cada reactor podrá producir hasta 200 kilogramos de plutonio apto para armas cada año, suficiente para unas 50 ojivas nucleares, indicó la organización estadounidense internacional IEEE Standards Association.
Asociación nuclear
La corporación estatal rusa de energía nuclear Rosatom proporciona uranio altamente enriquecido para los reactores de generación rápida chinos, señaló el Departamento de Defensa de los EE. UU. en un comunicado el 8 de marzo.
“Es muy preocupante ver a Rusia y China cooperando en esto”, dijo en el comunicado John F. Plumb, subsecretario de Defensa para Política Espacial de los EE. UU. “Es posible que solo sean puntos de conversación al respecto, pero no se puede eludir el hecho de que los reactores de generación rápida son plutonio, y el plutonio es para armas”.
“Esta es la segunda complicación”, abundó Rodríguez. “Ahora nos enfrentamos a una situación en la que probablemente vamos a tener un país más con armamentos nucleares suficientemente grandes para poner en peligro el planeta”.
A medida que aumentan estas preocupaciones nucleares, Rusia suspendió en febrero su participación en el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, diseñado para limitar la cantidad de ojivas nucleares y prevenir una guerra nuclear, reportó BBC.
“En este teatro de operaciones, China siempre ha dicho que no se va a sentar a la mesa para tener una negociación que involucre acuerdos sobre armas nucleares (…) hasta que tenga paridad nuclear”, expresó Rodríguez.
“La decisión rusa de retirarse del acuerdo es un chantaje nuclear peligroso, porque no se puede predecir cómo se comportará Vladimir Putin en el futuro y qué tiene en mente”, declaró a BBC Andrei Kolesnikov, del grupo de expertos del Fondo Carnegie para la Paz Internacional.
Si Beijín sigue expandiendo su arsenal al ritmo que va, habrá mayor riesgo de una carrera armamentista nuclear y mayores incentivos para que los Estados recurran a las armas nucleares en una crisis, indica The EurAsian Times.
“Por el momento, no veo un contexto de seguridad en Latinoamérica que justifique que alguno de estos países quiera construir armas nucleares, porque en muy complicado y caro”, expresó Rodríguez. “Pero China ayuda a ciertos países de la región a desarrollar con ‘menos restricciones’ sus centrales de energía nuclear”.
Efectos trágicos
“Un conflicto nuclear causaría incalculable sufrimiento humano y amenazaría la supervivencia de la humanidad”, señala CICR para México y Centroamérica. “No existe una capacidad de respuesta humanitaria adecuada en caso del uso de armas nucleares”.
“Por ello es prioritario estigmatizar las armas nucleares y eliminarlas por completo”, concluyó Rodríguez.
Fuente Dialogo-Americas