Se trata del fiscal especial John Durham, quien acusa a Hillary Clinton y al FBI de conspirar para manipular las elecciones de 2016 y señala a los presidentes Joe Biden y Barack Obama como conocedores y cómplices de la campaña conspirativa contra Trump
Por Jorge Mestre
Uno de los mantras más cacareados por la prensa de izquierdas en EEUU y en Europa es que Donald Trump tuvo un comportamiento deliberadamente antidemocrático al promover teorías falsas sobre las elecciones de 2020 y alentar el asalto al Congreso. Pero de lo que no hay duda es el tremendo varapalo que un investigador objetivo como el fiscal John Durham le da a la estrategia de la rival de Trump en las elecciones de 2016, Hillary Clinton, para manipular las votaciones con el FBI en las que Trump venció con claridad. Durham es el fiscal especial encargado de investigar si hubo irregularidades en la apertura de una investigación sobre la trama rusa de la campaña de Trump.
Sobre la candidata demócrata, Hillary Clinton. Durham asegura que Clinton era conocedora de que su comité de campaña estaba indirectamente pagando al ex espía británico, Christopher Steele, para excavar en posibles conexiones entre Trump y Rusia. Para el fiscal especial, Clinton trató de redirigir el foco sobre Donald Trump, calumniándolo y sosteniendo que era una especie de agente ruso para distraer la atención sobre los correos electrónicos hallados donde ella y otros líderes del partido demócrata habían conspirado para acabar con la candidatura del senador también demócrata, Bernie Sanders.
El informe del ex espía británico, pagado por Clinton, utilizado para obtener órdenes judiciales secretas para vigilar al entonces asesor de Trump, Carter Page, incluía un relato fantasioso del ex presidente pagando, por ejemplo, prostitutas para que orinaran en una cama de un hotel de Moscú, acusaciones que fueron reproducidas por diferentes medios de comunicación a principios de 2017. El fiscal Durham señala al analista Igor Danchenko como autor de la mayoría de información falsa recogida en el informe de Christopher Steele. Danchenko estuvo también a las órdenes del FBI trabajando como informante donde cobro más de 200.000 euros entre 2017 y 2020.
El informe dado a conocer ahora también confirma detalles sobre quiénes eran conocedores de que Hillary Clinton había diseñado la estrategia sobre la trama rusa y Donald Trump. Durham señala incluso al entonces, presidente, Barack Obama, y a los responsables del FBI y de la CIA. Las agencias de inteligencia estadounidenses recibieron información sobre análisis de inteligencia rusos que aseguraban que la candidata Hillary Clinton había aprobado un plan para provocar el escándalo contra Donald Trump, vinculándolo con Putin y el pirateo del Comité Nacional Demócrata por parte de los rusos.
Días después, el 3 de agosto de 2016, el presidente Obama fue informado junto con el entonces vicepresidente, Joe Biden y los directores de la CIA y del FBI. El fiscal especial acusa al FBI de proteger la campaña electoral de Hillary Clinton, quien fue informada de los posibles riesgos de manipulación existente por los servicios de espionaje ruso, mientras que el equipo de Trump fue completamente ignorado por el FBI.
El FBI reconoció tras la publicación del informe de John Durham que «su trabajo fue la razón por la cual la dirección actual del FBI ya implementó docenas de acciones correctivas que han estado vigentes durante los últimos tiempos. Si esas reformas se hubieran introducido en 2016, los pasos en falso identificados en el informe, podrían haberse evitado. Este informe refuerza la importancia de garantizar que el FBI continúe haciendo su trabajo con rigor, objetividad y la profesionalidad que el pueblo estadounidense merece y espera con razón».
Fuente Ok Diario