MIAMI, Estados Unidos. — El 4 de junio de 1794 abrió en La Habana la primera biblioteca pública en Cuba, bajo el auspicio de la Sociedad Económica de Amigos del País (SEAP).
El centro, que había sido inaugurado el 11 de julio de 1793 —tardó casi un año en ser declarado público— contó en sus inicios con 77 volúmenes, que un año más tarde se habían multiplicado a 1.402.
La biblioteca pública de la SEAP fue un deseo expreso de don Luis de las Casas, capitán general de la isla. Constituyó un pilar en la preservación de la identidad cultural del país, pues mantuvo en todas las épocas las mejores tradiciones cubanas y contribuyó a la formación de la conciencia ciudadana a través de la promoción de la educación e instrucción pública, la agricultura, la economía, la ciencia y la cultura.
El centro, tutelado por la iglesia, permaneció en el Convento de Santo Domingo desde 1800 a 1844. Ese lugar confrontaba problemas con el espacio y su estado se hizo deplorable. Gracias a la labor de José de la Luz y Caballero, director de la SEAP en 1838, algunas personas contribuyeron económicamente y realizaron donaciones de libros para la biblioteca.
En 1844, la biblioteca se trasladó al Convento de San Felipe, bajo la administración de la SEAP. Allí permaneció hasta 1856 en que sufrió un nuevo traslado.
Para el año 1882, la biblioteca atesoraba 21.078 volúmenes. El apoyo recibido durante estos años incrementó considerablemente sus colecciones, las cuales ascendían en 1899 a 41 487 volúmenes.
Los años de la república (1902-1959) fueron de beneficio para la biblioteca pública de la SEAP. Los esfuerzos desplegados por ilustres personalidades y próceres de las guerras de independencia en el siglo XIX, su incidencia en el ambiente cultural del país y el prestigio ganado en sus relaciones con bibliotecas de países de Iberoamérica y los Estados Unidos por medio del canje de sus memorias, contribuyó al crecimiento de sus fondos y a la cantidad de usuarios, así como a la permanencia en el ámbito cultural con el respaldo de instituciones privadas y de los gobiernos de turno.
En la actualidad, la biblioteca de la SEAP posee un fondo bibliográfico que sobrepasa el millón de documentos, entre los que figuran ocho libros incunables o editados a mano (anteriores al año 1500). También atesora casi 2.000 libros raros y valiosos desde el siglo XV hasta la actualidad, así como una colección de publicaciones periódicas cubanas con más de 700 títulos, la más completa del país.
Fuente Cubanet.org