El informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) publicado la semana pasada agudiza lo que sabemos desde hace mucho tiempo, y en este contexto no contiene ninguna noticia dramática.
Por el general (retirado) Tamir Hayman
La retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear, con el estímulo de ciertas fuerzas, ha resultado ser un error estratégico.
El programa nuclear se encuentra en su punto más avanzado y está cerca de convertir a Irán en un estado en el umbral nuclear.
Al mismo tiempo, no hay lugar para la histeria: Irán no está a minutos o días de una bomba nuclear, y aunque las posibilidades de enfrentarla se han reducido, aún existen.
Israel debe recalcular su ruta.
No puede repetir las mismas acciones y esperar resultados diferentes.
Israel debe actualizar su estrategia en la lucha contra la capacidad nuclear iraní porque, con toda honestidad, la estrategia actual, como lo demuestran los resultados, nos ha llevado a la peligrosa situación actual.
Los asuntos menos urgentes deben dejarse de lado y el enfoque debe estar en la cooperación íntima con los estadounidenses en todos los niveles, lo que incluye la definición encubierta de líneas rojas que, si se cruzan, requieren acción.
Al mismo tiempo, la experiencia demuestra que un marco de acuerdo con los países que tienen un programa nuclear es la forma preferida para detenerlos.
Por lo tanto, es de esperar que se tenga en cuenta a Israel en cuanto a los contactos políticos, en la medida en que existan, para que se tengan en cuenta sus intereses.
Fuente: INSS – The Institute for National Security Studies
Fuente Aurora