Kiev anuncia reconquista de tres pueblos y acusa a Moscú de explotar represa como táctica militar
Yurany Arciniegas
Este domingo 11 de junio el Ejército ucraniano anunció que retomó tres aldeas en el sureste del país, el primer triunfo de su contraofensiva. Más temprano, Kiev aseguró que la presa Kakhovka, en el sur del país invadido, fue destruida por las tropas rusas para evitar que las fuerzas ucranianas avanzaran en la región de Jersón. Sin embargo, Moscú rechazó esas acusaciones.
Entretanto, la ONU afirmó que la situación humanitaria es “enormemente peor” tras la ruptura de la presa.
Se trataría de la primera victoria de la contraofensiva ucraniana. Este domingo Kiev anunció que reconquistó tres aldeas en la región oriental de Donetsk.
Un anuncio que llega solo un día después de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, asegurara que se estaban llevando a cabo “acciones contraofensivas”.
La viceministra de Defensa de Ucrania, Hanna Maliar, anunció que la pequeña ciudad, Makarivka, cerca de Blagodatne, ahora se encontraba en manos de las tropas ucranianas.
Más temprano, las autoridades de dicho país ya habían dado a conocer la reconquista del pueblo de Neskuchne.
“Neskuchne, en la región de Donetsk, está nuevamente bajo la bandera ucraniana”, aseguró el servicio estatal de guardia fronteriza. Además, habían informado el éxito de la contraofensiva al quedarse con el pueblo de Blagodatné, también en dicha zona del país.
Sin embargo, Moscú volvió a afirmar que los intentos de Kiev han sido “fallidos” en tres frentes y que el Ejército ruso repelió más de una decena de ataques, especialmente alrededor de Zaporizhia.
“Durante el día pasado, las fuerzas armadas de Ucrania continuaron los intentos fallidos de operaciones ofensivas en las direcciones sur-Donetsk, Zaporizhia y Donetsk”, aseguró el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, teniente general Ígor Konashénkov.
Kiev: la explosión de la represa Kakhovka fue una táctica militar
La destrucción de la represa Kakhovka, un desastre que avanza rápido y que se está convirtiendo en una catástrofe ambiental de consecuencias generacionales. Así lo destaca el Grupo de Conservación de la Naturaleza de Ucrania.
Mientras continúan los graves efectos humanitarios y medioambientales del ataque, el Gobierno del país invadido denunció este 11 de junio que Rusia habría causado el desastre con una explosión al interior de la central hidroeléctrica de la localidad para frenar las operaciones del Ejército ucraniano en la región.
“La explosión de la central hidroeléctrica Kakhovka aparentemente se llevó a cabo con la intención de evitar que las Fuerzas de Defensa de Ucrania lanzaran una ofensiva en el sector de Jersón”, sostuvo la viceministra de Defensa.
Asimismo, la funcionaria de Kiev aseguró que la acción, que desató inundaciones de gran magnitud que han cubierto pueblos y aldeas enteras, atrapó a los residentes y arrasó viviendas, también tuvo como objetivo ayudar al despliegue de las reservas rusas en las áreas de la vecina Zaporizhia y en Bakhmut, una de las ciudades más disputadas en el este de Ucrania.
Sus declaraciones se producen después de que el pasado viernes 9 de junio, el Ejército de Volodímir Zelenski difundiera el audio de la interceptación de una llamada entre militares rusos, que, asegura, prueba la autoría de Moscú.
Sin embargo, el Kremlin rechaza los señalamientos y, en cambio, acusa a su contraparte. Las presuntas evidencias no han sido verificadas de forma independiente.
Los gobiernos occidentales señalan que aún se encuentran recabando pruebas, pero argumentan que Ucrania no tendría motivos para autoinfligirse un desastre tan devastador, especialmente en momentos en que sus fuerzas ultimaban la preparación de una gran contraofensiva para recuperar sus territorios arrebatados por Moscú.
Ucrania enfrenta una situación humanitaria “enormemente peor”
Las graves consecuencias para la población son mucho mayores a la que el país invadido por Rusia ya sostenía antes de la ruptura de la presa, ocurrida el pasado martes 6 de junio, aseguró el responsable de Asuntos humanitarios de la ONU, Martin Griffiths.
Unas 700.000 personas se encuentran sin agua potable y los estragos de las inundaciones en uno de los graneros más importantes del mundo conducirán casi “inevitablemente” a menores exportaciones de granos, mayores precios de los alimentos en todo el planeta y menos alimentos para millones de necesitados, advirtió Griffiths.
“Este es un problema viral (…) Pero la verdad es que esto es solo el comienzo de las consecuencias”, anticipó el alto funcionario de Naciones Unidas.
Por su parte, el presidente del país atacado, Volodímir Zelenski, criticó a partes de la comunidad internacional por ser “vergonzosamente indiferentes” a los desastres humanitarios y ambientales causados por la ruptura de la represa.
“Cuando las organizaciones internacionales que se supone deben proteger la vida a escala mundial no logran formar y enviar una misión de rescate al territorio ocupado, incluso una semana después, cuando algunos actores mundiales no se atreven a salir con declaraciones claras y contundentes condenando este último ataque y crimen de guerra ruso, los terroristas simplemente se ven alimentados por esta debilidad del mundo, esta indiferencia, los alienta”, enfatizó Zelenski.
Las labores de rescate son particularmente complicadas para Kiev, ya que el río Dniéper, el principal del país invadido y cerca al cual ocurrió el desastre, forma parte de la línea del frente de batalla. Kiev mantiene su autoridad en la orilla occidental o margen derecho, pero Moscú ocupa desde los primeros días de la guerra la parte oriental o margen izquierdo, donde se encuentra la represa, por lo que las autoridades locales difícilmente pueden acceder a esas localidades de su país y urgen a la ayuda internacional.
Moscú, por su parte, asegura que adelanta operaciones de evacuación y atención de los civiles afectados.
Un desastre con consecuencias generacionales
A las declaraciones de la ONU se suman las de expertos ambientalistas.
Los efectos inmediatos son notorios a simple vista: miles de parcelas de tierra y viviendas inundadas, centenares de animales silvestres y peces muertos, grandes daños a la fauna y flora y miles de personas atrapadas sin agua potable, entre otras graves consecuencias.
Pero los peligros a largo plazo serán peores. ¿Por qué habrá consecuencias para varias generaciones? El Grupo de Conservación de la Naturaleza de Ucrania explica que por cada casa y granja inundada hay campos de granos, frutas y vegetales recién sembrados cuyos canales de irrigación se están secando.
Miles de peces quedaron boquiabiertos en los lodazales. Las aves acuáticas jóvenes perdieron sus nidos y sus fuentes de alimento. Innumerables árboles y plantas se sumergieron.
El agua es vida y “el drenaje del embalse de Kakhovka crea un futuro incierto para la región” de Jersón, en el sur de Ucrania, que era una llanura árida hasta que fue construida la represa del río Dniéper hace 70 años, remarca Kateryna Filiuta, experta en hábitats protegidos del grupo de expertos.
La represa Kakhovka fue la última de un sistema de seis similares de la era soviética en esa corriente de agua, que fluye desde la vecina Belarús hasta el Mar Negro.
Pero el principal río que atraviesa Ucrania se convirtió en uno de los mayores frentes de batalla desde que Rusia ordenó la guerra el 24 de febrero de 2022. En medio de los ataques armados y ahora tras el desastre por el colapso de la represa, las consecuencias se magnifican.
Moscú: el río Dniéper volvería a su cauce habitual en Nova Kakhovka el 16 de junio
Las declaraciones fueron hechas por el alcalde impuesto por Rusia en Nova Kakhovka, Vladimir Saldo, tras citar cálculos preliminares del productor hidroeléctrico ruso RusHydro.
Además, señaló que el nivel del agua en esa zona ocupada por las tropas invasoras ha bajado tres metros desde el pasado martes 6 de junio.
“Ya comenzaron los bombeos de agua y recolección de basura de las calles”, afirmó el funcionario ruso.
Saldo agregó que alrededor de 7.000 personas han sido evacuadas de los distritos inundados de la localidad, incluidos 323 niños, mientras que 77 personas han sido hospitalizadas.
En las últimas horas, tanto el alcalde impuesto por el Kremlin en la zona como el Ejército ucraniano se acusaron mutuamente de lanzar presuntos bombardeos que atentan contra los civiles en los territorios ucranianos inundados.
El cruce de acusaciones tiene lugar en momentos en que la contraofensiva anunciada desde hace meses por Kiev se estaría desarrollando en al menos cuatro áreas, incluida la disputada Bakhmut, en el este, según sugirió el presidente Zelenski el sábado, un día después de que el mandatario ruso Vladimir Putin asegurara que esa operación ya está en marcha.
Pero, por el momento, Ucrania no confirma de forma contundente el inicio de la operación a gran escala, mientras encara las consecuencias por el desastre en Nova Kakhovka.
Con Reuters y AP-FP