Rusia abre caso por rebelión armada contra jefe mercenario Yevgueni Prigozhin, quien gozaba de la confianza de Vladimir Putin, quien hasta ahora no se pronuncia. Siempres se dijo que Prigozhin funcionaba como testaferro de Putin. Prigozhin denunció que el ejercito ruso bombardeó sus bases.Reina el desconcierto en Moscú.
El grupo Wagner de Prigozhin ha demostrado ser fundamental para el esfuerzo de guerra ruso en Ucrania, pero en los últimos meses, reprendió repetidamente a los altos mandos de Rusia por supuesta corrupción e indiferencia. El viernes por la noche, pidió represalias contra el Ministerio de Defensa ruso luego de que acusara a los militares de atacar a sus fuerzas.
No había ninguna señal de que Prigozhin representar una amenaza inmediata para la permanencia de Putin en el poder. Pero los rápidos acontecimientos del viernes por la noche representaron el conflicto interno más dramático dentro del país desde la invasión a Ucrania, hace 16 meses.
No había rastro del paradero de Prigozhin, y hasta la medianoche, hora de Moscú, sus cuentas de redes sociales habían estado en silencio durante más de una hora.
El jefe de la milicia rusa Wagner, que llamó a rebelarse contra la comandancia militar rusa, aseguró que cuenta con 25.000 combatientes e instó a los rusos a unirse a ellos.
El Comité Antiterrorista de Rusia informó este viernes de la apertura de un caso penal por llamamientos a rebelión armada tras las declaraciones del jefe del grupo mercenario Wagner, Yevgueni Prigozhin, sobre la intención de castigar a la cúpula militar rusa por ataque a sus bases.
“Las declaraciones difundidas en nombre de Yevgueni Prigozhin no tienen fundamento. En relación con estas declaraciones, el Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia incoó un caso penal por llamamiento a rebelión armada. Exigimos el cese inmediato de actividades ilegales”, dice el comunicado oficial, citado por la agencia TASS.
“Somos 25.000…” amenaza el jefe mercenario en dirección a Moscú
“Somos 25.000 y vamos a determinar las causas del caos que reina en el país (…). Nuestras reservas estratégicas son todo el ejército y todo el país”, declaró en un mensaje de audio el jefe del grupo de mercenarios, Yevgueni Prigozhin, llamando a unirse a sus hombres a “todos los que quieran” para “acabar con el desorden”.
El presidente Vladimir Putin estaría “al tanto” de las amenazas del jefe de los mercenarios, Yevgueni Prigozhin y ya estaría tomando las “medidas necesarias”, reportó la agencia rusa de noticias TASS. La Justicia rusa habría abierto una investigación al jefe de Wagner por tentiva de “motín” militar.
Fuentes ucranianas difundieron un video en Twitter según el cual militares rusos habrían bombardeado una trinchera de los mercenarios del Grupo Wagner, destruyento y matando a los combatientes. Una acción que el ministro de Defensa de Rusia negó.
Guerra entre rusos en medio de la contraofensiva ucraniana
Estas tensiones se dan en plena contraofensiva de las tropas ucranianas para reconquistar territorios tomados por Rusia desde el inicio de la intervención militar en febrero de 2022. Pocas horas antes del estallido de esta crisis, Prigozhin aseguró que el ejército ruso se estaba “retirando” en el este y el sur de Ucrania, contradiciendo las afirmaciones del Kremlin, para el cual la contraofensiva de Kiev está fracasando.
“El ejército (ruso) se retira en las zonas de Zaporiyia y Jersón (sur), las fuerzas armadas ucranianas están haciendo retroceder” a las tropas rusas, declaró en una entrevista publicada en Telegram por su servicio de prensa. “No hay ningún control, no hay triunfos militares” de Moscú, insistió Prigozhin, agregando que los militares rusos “se lavan con su sangre”, aludiendo a grandes pérdidas sufridas por las tropas regulares.
Putin y a su ministro de Defensa, Serguéi Shoigu, aseguran en cambio que el ejército está “repeliendo” todos los ataques ucranianos