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Por Eduardo Paladini
La comparación con la PASO 2019 es demoledora para Massa. En 4 años perdieron más de 5 millones de votos.
La comparación es demoledora por dónde se la mire. No sólo porque en la PASO presidencial 2019 el entonces Frente de Todos se había asegurado la sucesión varios meses antes y ahora, con Unión por la Patria, quedó tercero. Ese cimbronazo es sólo la puerta de una debacle de la que brotan malas noticias cada vez que se mete el cuchillo estadístico.
Clarín armó un mapa con los resultados que habían obtenido los Fernández con fórmula única del peronismo unificado hace cuatro años y los que obtuvieron en suma los binomios que encabezaron Sergio Massa y Juan Grabois.
La comparación se puede hacer en porcentajes, pero también en votos, porque en ambas tandas votaron unos 24 millones de electores. Ocurre que si bien aumentó la población, ese cambio quedó neutralizado por una participación más baja: 76,40% en 2019 contra casi 70% de este domingo.
Y ese primer dato cuantitativo habla por sí solo: entre una primaria y la otra, el oficialismo perdió más de 5 millones de votos. Alberto y Cristina habían conseguido más de 11 millones y medio en esa primaria (casi 48%) contra los menos de 6 millones y medio que totalizaron las dos duplas actuales (menos de 28%), en lo que fue la peor elección presidencial de la historia para el peronismo.
Sólo retuvieron 5 provincias
¿Más números contundentes?
– Entre Massa y Grabois sólo pudieron retener cinco provincias en las que el Frente de Todos había ganado en 2019: en orden decreciente de tamaño, Buenos Aires, Chaco, Santiago del Estero, Formosa y Catamarca.
– Pero aun en las provincias que retuvieron, la caída fue abrupta: sólo en Santiago del Estero lograron superar el 50%, cuando en 2019 habían pasado los 75 puntos. En Catamarca y Formosa, donde ahora estuvieron arriba de 40%, en tanto, antes habían alcanzado 57% y 66%.
– En Buenos Aires, la madre de todas las batallas, perdieron 18,5 puntos porcentuales, más de dos millones de votos.
– En otras 17 provincias que el peronismo había ganado la primaria hace cuatro años ahora perdieron. Los casos más emblemáticos: Mendoza, Neuquén, Chubut, San Luis y La Pampa, donde pasaron de primeros a terceros. Mientras que ahora quedaron segundos en Santa Fe, Tucumán, Entre Ríos, Salta, Misiones, Corrientes, San Juan, Río Negro, Jujuy, La Rioja, Santa Cruz y Tierra del Fuego.
El caso Córdoba
Otro caso paradigmático de la caída oficialista fue lo que ocurrió en Córdoba. En la PASO 2019, los boca de urna en esa provincia, que tenían al peronismo muy competitivo, fueron el primer indicio de que se estaba haciendo una gran elección para el Frente de Todos. Los Fernández superaron los 30 puntos y quedaron segundos.
Ahora, entre Massa y Grabois no llegaron a los dos dígitos y finalizaron cuartos. No consiguieron siquiera igualar el piso históricamente pobre que tuvo el kirchnerismo en esa provincia. Con 8,66%, quedaron debajo de Javier Milei (33,61%), Juan Schiaretti (27,53%) y Patricia Bullrich + Horacio Rodríguez Larreta (25,16%).
Las caídas más abruptas
Cuando se hacen las comparaciones porcentuales, las cifras también abruman. En 18 de las 24 provincias del país, Massa + Grabois cayeron más de 20 puntos respecto a los Fernández. Visto del otro lado, en una sola perdieron dentro del rango de un dígito.
Curiosamente, la baja menos dolorosa se dio en un distrito profundamente anti K: la Ciudad de Buenos Aires. Allí se pasó de 33% a 23,5% y se mantuvo el segundo puesto.
Las pérdidas más cuantiosas, en tanto, se resumen en este puñado de resultados:
– Misiones: de 56,11% a 27,15%, 28,96 puntos menos.
– Chubut: de 50,99% a 22,82%, 28,17 puntos menos.
– Río Negro: de 54,11% a 26,7%, 27,84 puntos menos.
– San Luis: de 44,23% a 17,41%, 26,82 puntos menos.
– Tierra del Fuego: de 55,43% a 29,25%, 26,18 puntos menos.
– San Juan: de 54,95% a 29,04%: 25,91 puntos.
– Santa Cruz: de 46,97% a 21,35%, 25,62 puntos menos.
– Jujuy: de 46,08% y 20,68%, 25,40 puntos menos.
Fuente Clarin
