La eliminación de un alto funcionario iraní: el dilema de Teherán

Por el general (de la reserva) Tamir Hayman

Felicitaciones a quien lo hizo, quienquiera que haya sido, por haber elegido un buen y digno objetivo.

Debemos prepararnos para la respuesta, porque llegará.

Si esta respuesta proviene del ámbito norte, continuará la dinámica de escalada frente a Hezbollah, que podría convertirse en una guerra total en ese dominio.

¿Por qué es significativa la eliminación de Razi Mousavi?

1. Se trata de un golpe para Irán, que hasta ahora se ha mantenido al margen y está librando una guerra por medio de representantes o apoderados (proxies) en múltiples frentes en contra nuestra sin pagar un precio.

2. Mousavi era un hombre talentoso en logística.

Gestionó personalmente el suministro de armas avanzadas para Hezbollah y para las milicias chiís en Siria.

En efecto, él era el motor que impulsaba la intensificación de la acumulación de fuerza.

El dilema de la respuesta iraní:

1. La actividad de Hezbollah está muy cerca del límite superior por debajo del umbral de guerra.

Si la organización reacciona de una manera que cruce este umbral (disparos al centro de Israel, misiles de precisión), esto podría conducir a una guerra con Israel.

Desde la perspectiva de Israel, esto proporcionaría una buena excusa para eliminar la amenaza a las comunidades del norte, y contaría con el respaldo estadounidense.

En lo que respecta a Hezbollah e Irán, esto no vale la pena en la situación actual.

2. Una respuesta de los demás apoderados (proxies) se perderá en la conmoción general.

Los hutíes, iraquíes y sirios ya están operando, algunos de ellos de manera bastante agresiva.

Para ellos, otro misil dirigido a un barco u otro vehículo aéreo no tripulado contra Israel no será una respuesta adecuada.

3. Una reacción del propio Irán pone a Irán en riesgo de una contrarreacción israelí-estadounidense. Esto pone en peligro el mayor logro de Irán hasta el momento: el hecho de que, si bien está detrás de todo, no ha pagado ningún precio.

4. El asesinato de un funcionario israelí en el extranjero siempre es posible: una acción simétrica y proporcionada, desde el punto de vista de Irán.

Su problema es que esto es difícil de lograr.

Afortunadamente (y también agradeciendo al Mossad), hasta ahora todos estos intentos han sido frustrados.

Pero eso no garantiza nada en el futuro.

Fuente: INSS – The Institute for National Security Studies

Fuente Aurora