La erupción de un supervolcán posiblemente desempeñó un papel fundamental en el inicio de la expansión de los primeros humanos modernos hacia otros continentes.
Este evento transformó el paisaje y los recursos disponibles, lo que podría haber impulsado a estas poblaciones a buscar nuevas oportunidades fuera de su lugar de origen.
Durante varias décadas, los expertos han investigado esta teoría, y revelaron conexiones entre la erupción volcánica y el movimiento de los primeros humanos modernos.
El impacto de un supervolcán que impactó de lleno en África y su relación con la migración humana
Según un artículo publicado el sitio especializado Wired, el supervolcán Toba, situado en la isla de Sumatra, Indonesia, desempeñó un papel crucial hace aproximadamente 74.000 años para la evolución humana.
Recientes hallazgos arqueológicos y estudios científicos, como el realizado por la Universidad de Arizona, corroboran la influencia de esta catastrófica erupción en la dispersión de los humanos modernos fuera de África.
Entre los efectos catastróficos del supervolcán, están:
- La erupción del Toba es una de las más grandes de la historia. Sus consecuencias fueron devastadoras a nivel global.
- Las enormes cantidades de cenizas y gases expulsados a la atmósfera provocaron un invierno volcánico que alteró drásticamente el clima global durante años.
- El invierno global duró aproximadamente 7 años. Esto redujo las temperaturas en hasta 3.5 grados Celsius en promedio a nivel mundial.
- Los efectos fueron especialmente notables en las regiones cercanas al volcán. Allí, los ecosistemas se vieron afectados durante décadas.
Por otro lado, los estudios arqueológicos revelan que las primeras evidencias de agrupamientos de humanos modernos se encuentran en África.
La migración masiva desde este continente hacia otras regiones ocurrió hace unos 100.000 años. Algunos expertos sugieren que la erupción del Toba desempeñó un papel crucial en este movimiento poblacional.
La teoría propuesta indica que el invierno global desencadenado por el Toba pudo haber provocado condiciones ambientales extremadamente difíciles en África.
Esto habría obligado a las poblaciones humanas a buscar nuevos territorios en busca de mejores condiciones de supervivencia.
Los hallazgos arqueológicos y los estudios genéticos respaldan la idea de que la erupción del Toba tuvo un impacto significativo en la dispersión humana.
Esto es así porque la diversidad genética presente en las poblaciones humanas fuera de África sugiere migraciones masivas y poblaciones fundadoras que se dispersaron en respuesta a eventos catastróficos como el supervolcán.
El estudio realizado por la Universidad de Arizona proporciona evidencia adicional que respalda esta teoría. Los análisis de sedimentos en el Lago Malawi sugieren que la erupción del Toba tuvo un impacto significativo en el clima local y posiblemente en las poblaciones humanas que habitaban la región en ese momento
El supervolcán Toba y las complicaciones de la migración humana
La evidencia reciente de vidrio volcánico del Toba en yacimientos humanos revela impactos sorprendentes en la migración prehistórica. Esta presencia, en Sudáfrica, a 9000 kilómetros de Sumatra, indica la escala global del evento.
Los restos de este compuesto también se encontraron en Etiopía. Asimismo, estos descubrimientos desafían la noción de que los humanos solo migraron a entornos húmedos, lo que demuestra la capacidad humana para superar obstáculos.
Fuente El Cronista