El importante hallazgo de una señal limítrofe histórica tuvo lugar la semana pasada durante una caminata turística y de relevamiento por parte de un guía en el Parque Nacional (PN) Nahuel Huapi, en Neuquén. Se trata de una placa de metal que fue puesta allí en el siglo XIX y sirvió como referencia para dividir los territorios de la Argentina y Chile en aquella región patagónica.
Desde la Administración de Parque Nacionales dieron cuenta de esta noticia mediante su sitio web oficial, en donde celebraron el descubrimiento de esta señal que fue colocada en la proximidad del Cerro Pantojo a 1700 metros de altura por sobre el nivel del mar, gracias al trabajo que realizó la expedición de la subcomisión de límites bajo la dirección del Perito Francisco Pascasio Moreno.
Este elemento data de la década de 1890 y tiene su origen en el proyecto de demarcación territorial de la Comisión Mixta de Límites. Fue encontrada durante una caminata turística por parte del guía Darío Remorino, que al momento de verla dio inmediato aviso a los responsables del parque. Según indica el comunicado de prensa, quien tomó nota del asunto fue el guarda parques Germán Solveira, jefe de la zona Noroeste del PN Nahuel Huapi.
Asimismo, el trabajo de rescate estuvo comandado por “el arqueólogo Emmanuel Vargas y el técnico Rafael Taubenschlag, ambos trabajadores del Museo de la Patagonia (en San Carlos de Bariloche), por el guarda parque Mauro Piñeiro y por el guía Remorino”. Lo curioso es que esta placa se instaló a 3 kilómetros del límite fronterizo con la Región de los Lagos en Chile.
La extracción de la misma se hizo con especial cuidado (incluso se retiró el cemento que la recubría y los sedimentos que tenía adheridos). Luego, la envolvieron en un plástico especial para que el aire (o componentes externos) no la afecten y propicie una degradación mucho más rápida.
Según indicaron desde el sitio mencionado, la placa será puesta en valor y se expondrá en el Museo de la Patagonia. Luego, tras un proceso de geolocalización por GPS, se marcó el punto exacto en donde se hallaba, con el fin de instalar una réplica. El fin último es mantener y conservar aquella reliquia histórica, símbolo de un precedente en el inicio de desarrollo de la región al extremo sur del país.
Ya en el laboratorio del Museo de la Patagonia, los expertos la limpiaron mediante el uso de “materiales no invasivos ni corrosivos”. Luego se la catalogó y se aplicó un registro técnico para reconstruir la misma en 3D. Esta será la réplica que se instalará más adelante en su punto original.
“La mencionada placa funcionó como uno de los tantos puntos geodésicos de control para los trabajos de relevamiento topográfico realizados en la zona de influencia del actual paso Cardenal Samoré, donde finalmente se terminarían marcando dos hitos topográficos relevantes: Volcán Pantojo y el Cerro Mirador”, reza el comunicado. En cuanto al marco histórico de aquella placa, indica que “fue colocada por la 4ª subcomisión de límites a cargo del Topógrafo Enrique Wolf, quien bajo la dirección del Perito Moreno, fue el responsable de las tareas de delimitación desde el paralelo 37º hasta el paralelo 41º”.
Por su parte, en un video que se publicó en la cuenta de Instagram del Parque Nacional Nahuel Huapi y que resumió lo que sucedió y qué proceso se realizó a posterior con la placa, Emmanuel Vargas, del Museo de la Patagonia, destacó: “Es significativa para la historia del límite”. Cabe recalcar que esta reserva natural fue la primera de nuestro país y se fundó en 1934.
Fuente La Nacion