Por Adalberto Agozino
Ante el inminente colapso del Frente Polisario, nuevos dirigentes saharauis, más democráticos y realista, se preparan para conducir a la población retenida en Tinduf por un camino de paz y entendimiento con Marruecos.
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Después de casi medio siglo de exilio forzado, viviendo en miserables campamentos dentro de Argelia, dependiendo de la ayuda humanitaria internacional, y de llevar adelante una cruenta e infructuosa guerra contra las Fuerzas Armadas Reales, los saharauis residentes en los campamentos de Tinduf ya no creen en las mentiras del Frente Polisario y están preparados para abordar nuevas soluciones más realistas y posibles.
Esto se refleja en el creciente apoyo que recibe el Movimiento Saharaui por la Paz (MSP), una organización surgida, hace cuatro años, de una escisión en el Frente Polisario y formada por exdirigentes polisarios, residentes de los campamentos y personalidades de la diáspora saharaui que busca una vía alternativa, pacífica y posible para poner fin al conflicto artificial del Sáhara.
Esta semana, en una entrevista exclusiva con el diario Essabah, el primer secretario del MSP, el notable Hach Ahmed Bericalla señaló que el proyecto del Polisario, de buscar un triunfo militar sobre Marruecos, ha entrado en una suerte agonía y estancamiento, especialmente desde su derrota en el paso de Guerguerat, en noviembre de 2020.
Hach Ahmed ha señalado que la eficacia de los drones militares empleados por Marruecos ha cambiado radicalmente la situación estratégica, tornando suicida cualquier acción del Ejército Popular Saharaui sobre el terreno.
Tras recordar las afirmaciones del anterior presidente mauritano, Ould Abdelaziz, referidas a que los países de Occidente se “oponen a la existencia de un Estado entre Marruecos y Mauritania”, el primer secretario del MSP, recalcó que su movimiento “rechaza que los jóvenes saharauis sigan siendo sacrificados en una guerra asimétrica, a todas luces, imposible e inútil.”
Añadiendo luego que, dentro del MSP “apostamos decididamente por la solución pacífica, por el camino del diálogo, por un acuerdo de paz y convivencia con el Reino de Marruecos bajo garantías internacionales.”
Para concluir, Hach Ahmed, quien recientemente ha realizado una exitosa gira de difusión del MSP por América Latina, señaló que “desde los sucesos de Guerguerat, el proyecto del Polisario ha entrado en una especie de agonía”, subrayando para concluir la necesidad de “evitar un desenlace caótico” en los campamentos de Tinduf y que una “nueva fuerza política saharaui auténtica, pragmática y con los pies en la tierra está lista para hacerse cargo y encauzar la situación hacia buen puerto, a través de un pacto que no deje “vencedores ni vencidos”, con el Reino de Marruecos.
En este sentido, es conocido que el Movimiento Saharaui por la Paz, acepta y valora la Iniciativa para la Negociación de un Estatuto de Autonomía en el Sáhara, presentado por Marruecos como una solución posible, realista y justa destinada a aportar una solución a este conflicto.
Hacha Ahmed ha expresado en múltiples ocasiones que se debe buscar a la brevedad una solución realista y posible a un conflicto internacional que se está quedando fuera de la agenda internacional (debido a las crisis en Ucrania y Palestina y a otros temas de mayor preocupación general, como el cambio climático) y que podría entrar en la parálisis y el olvida, prolongándose sin grandes cambios por cien años más.
Es por lo que, los dirigentes saharauis, más democráticos, serios y realistas comprenden que ha llegado el momento de la paz y el entendimiento con Marruecos.