El fenómeno tuvo lugar en las playas de la localidad balnearia de San Sebastián, al norte de Río Grande, como consecuencia de la intensa ola de frío polar que aqueja a toda la Patagonia argentina. Video.
Los habitantes de la localidad balnearia de San Sebastián, que está ubicada al norte de Río Grande, en la provincia de Tierra del Fuego, fueron testigos de una increíble e imponente postal: el congelamiento de las olas del mar que baña sus costas.
Según explicaron los especialistas, el fenómeno se produjo como consecuencia de la intensa ola de frío polar que desde hace varias semanas viene aquejando fuertemente a toda la Patagonia argentina,
En los diferentes videos que fueron subidos por los lugareños a las redes sociales puede verse claramente cómo las olas del océano se transformaron en imponentes formaciones de hielo blancas.
“Esto ocurre en la restinga de marea, es decir en la zona que queda descubierta cuando la marea baja. En Ushuaia, la marea es chica y baja 1 metro; en San Sebastián, entre 6 y 10 metros. Descubre mucha tierra, dejando una parte de la costa con pozones de agua que son fáciles de congelar”, explicó Jacobo Martín, investigador del Conicet en el Laboratorio de Oceanografía del Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC), en una entrevista con el diario Río Negro.
“Lo que sucede es que la marea se retira y el viento crea salpicaduras de espuma. Esas gotitas de agua del mar van cayendo unas encima de otras, se congelan y forman un arco de aguas congeladas“, concluyó el especialista.
Por su parte,según informe elaborado por el Servicio Meteorológico Nacional, la Patagonia argentina está transitando por uno de los períodos con mayor caída de nieve de las últimas décadas, en tanto que anticiparon que para los próximos días se aguardan más nevadas como, así también, muchas lluvias y fuertes vientos en toda el extremo sur argentino.
Cabe señar que San Sebastián es una zona de las más ventosas del planeta, con vientos fuertes que soplan durante todo el año, más aún durante la primavera, principalmente del cuadrante oeste y sudoeste, pudiendo superar holgadamente los 100 kilómetros por hora.
Fuente Perfil