Ante la ansiedad de los inversores por una desaceleración económica norteamericana, el índice Nikkei 225 de Japón registra su peor desplome desde 1987
TOKIO.- Una ola de nerviosismo en los mercados de todo el mundo desencadenó una caída histórica en los índices principales este lunes. Los temores sobre el debilitamiento de la economía, exacerbados por noticias desalentadoras en el sector tecnológico y un informe laboral preocupante en Estados Unidos, han llevado al índice de volatilidad CBOE, conocido como VIX, a su nivel más alto desde finales de 2022.
Las acciones de importantes empresas tecnológicas, como Atlassian, cayeron un 18% después de emitir una guía financiera decepcionante y anunciar la salida de su principal ejecutivo de ventas. Snap también sufrió una caída del 25% tras no cumplir con las expectativas de ingresos del segundo trimestre y emitir una guía más baja de lo esperado debido a un entorno publicitario debilitado. Amazon registró una disminución del 12% en sus acciones después de reportar ingresos trimestrales más bajos de lo anticipado, lo que se atribuyó a un cambio en las preferencias de los consumidores hacia productos más baratos
El índice de referencia Nikkei 225 de Japón se desplomó hasta un 12,4% el lunes por la mañana en medio de una ola de ventas desatada por los temores acerca de la economía de Estados Unidos. En Europa, en tanto, las principales bolsas abrieron a la baja, lastradas principalmente por los valores bancarios y tecnológicos, siguiendo los desplomes registrados horas antes en Asia.
El Nikkei cerró con pérdidas de 4451,28 puntos, a 31.458,42. El índice más amplio TOPIX también cayó un 12,8% tras un repunte de las ventas por la tarde.
Un reporte que mostraba que las contrataciones de empleadores de Estados Unidos habían bajado el mes pasado mucho más de lo previsto convulsionó los mercados financieros y evaporó la euforia que había llevado al Nikkei a máximos históricos de más de 42.000 puntos en las últimas semanas.
La peor caída del Nikkei en un solo día fue un desplome de 3836 puntos, el 14,9%, en un día apodado “Lunes negro” en octubre de 1987. Los precios de las acciones han descendido en Tokio desde que el Banco de Japón subió su tasa de interés de referencia el miércoles. Ahora el índice se ubica en aproximadamente el nivel que tenía antes de que empezara el año.
Un factor que llevó al banco central a subir las tasas fue la prolongada debilidad del yen japonés, que impulsó la inflación por encima del objetivo de inflación del 2% del banco.
Las acciones habían alcanzado cotas estratosféricas este año por el frenesí de compras en empresas que se espera prosperen gracias a los avances en inteligencia artificial. El último revés en golpear los mercados asestó un golpe a fabricantes de procesadores para computadoras como Samsung Electronics y otros títulos tecnológicos. El índice surcoreano Kospi cayó el lunes un 6,5% y las acciones de Samsung perdieron un 7,7%.
El índice taiwanés Taiex se desplomó un 7,4% y Taiwan Semiconductor Manufacturing Co., el mayor fabricante de chips del mundo, perdió un 8%.
Las acciones se desplomaron el viernes tras un dato de empleo más débil de lo esperado que avivó los temores a que la economía estadounidense pueda estar cediendo bajo el peso de altas tasas de interés que pretendían contener la inflación. El futuro de los títulos del S&P 500 era el lunes por la mañana un 1,5% más bajo, y el del Dow Jones Industrial Average perdía un 0,7%.
Los precios del crudo apenas cambiaron. El crudo de referencia estadounidense ganó 9 centavos, a 73,61 dólares por barril, mientras que el Brent se mantuvo a 76,81 dólares por barril.
Los inversionistas estarán atentos a los datos del sector servicios estadounidense que publicará más tarde el lunes el Instituto de Gestión de Suministros de Estados Unidos (ISM, por sus siglas en inglés), y que podrían ayudar a determinar si el aluvión de ventas en todo el mundo es una reacción exagerada, indicó en un reporte Yeap Jun Rong, de IG.
Lunes negro
El índice Nikkei 225 es el principal índice bursátil de Japón. Representa un promedio ponderado de precios de 225 acciones seleccionadas de las empresas más grandes y líquidas que cotizan en la Bolsa de Valores de Tokio (Tokyo Stock Exchange, TSE). Estas empresas abarcan una amplia gama de sectores industriales, incluyendo tecnología, manufactura, finanzas, transporte y consumo, entre otros.
Creado en 1950, el Nikkei 225 es similar al Dow Jones Industrial Average en Estados Unidos, en el sentido de que es un índice de precios ponderados y es uno de los indicadores más utilizados para medir el desempeño del mercado de valores japonés. La composición del índice es revisada anualmente para asegurar que sigue siendo representativo del mercado japonés en general.
Una de las caídas más significativas del Nikkei 225 ocurrió el 19 de octubre de 1987: el famoso lunes negro, cuando las acciones cayeron en todo el mundo, con el índice de Tokio desplomándose 3836,48 puntos, o casi un 15%, y otros mercados mundiales bajando aún más. Los inversores vendieron acciones creyendo que los precios eran demasiado altos.
Luego, los mercados de Japón se recuperaron relativamente rápido porque el país todavía estaba en medio de una burbuja financiera que llevaría al Nikkei a casi 39.000 antes de colapsar a principios de 1990. El Nikkei no recuperó ese pico anterior de 38.915,87 hasta principios de este año.
Europa, en rojo
Frankfurt perdía más de 3% poco después de la apertura de este lunes , mientras que París cayó 2,6% y Londres 2,3%. Madrid cedió un 2,8% y Milán se desplomó un 4%.”El detonante: un informe sobre el empleo en Estados Unidos publicado el viernes, que hizo caer las acciones y los rendimientos de los bonos [en Wall Street]” , explicó Stephen Innes, analista de SPI Asset Management.
A raíz de esta publicación, los rendimientos de la deuda pública cayeron con fuerza, lo que hace presagiar que la Reserva Federal estadounidense (Fed) podría recortar sus tasas más drásticamente de lo esperado.
Si en septiembre la Fed “hace su primer recorte de tipos de 50 puntos básicos”, en lugar de los 25 puntos básicos que espera el mercado, “será su forma de admitir” que tardó demasiado en relajar la política monetaria, consideró Innes.
Por su parte, los analistas de Deutsche Bank señalaron que la magnitud de la anticipación del mercado sobre el número de bajas de tasas de la Fed “en los próximos 12 meses sólo se ha visto durante una recesión”.
En el mercado de deuda, los rendimientos estadounidenses, que se mueven en dirección opuesta a los precios de los bonos, siguieron bajando y llegaron a 3,76% hacia esta mañana, frente al 3,79% de las obligaciones a diez años del viernes, lo que muestra el interés de los inversores por valores más seguros que las acciones, consideradas como un activo de riesgo.
Con información de las agencias AFP, AP y Reuters