La Agencia de Seguridad de Israel (ISA) ha arrestado a 18 ciudadanos israelíes sospechosos de colaborar con la inteligencia iraní. Entre ellos, siete emigraron desde Azerbaiyán y han estado en contacto con Irán durante dos años. Algunos vigilaban a un oficial de la Fuerza Aérea israelí con la intención de asesinarlo. Los sospechosos son acusados de recopilar información sobre bases militares, baterías de la Cúpula de Hierro y otras infraestructuras energéticas. También obtuvieron mapas de sitios estratégicos israelíes de sus contactos iraníes. Se estima que realizaron unas 600 misiones por cientos de miles de shekels pagados en efectivo y criptomonedas.
Otro sospechoso, Vladimir Varehovsky, de Tel Aviv, fue detenido por espiar para Irán y planear asesinar a un científico israelí por 100.000 dólares. Había adquirido armas, pero fue detenido antes de actuar. En una operación separada, la ISA arrestó a siete jóvenes palestinos del este de Jerusalén, reclutados para realizar tareas como incendiar coches y conspirar para asesinar a un científico, utilizando redes sociales para reclutar a otros.
Entre los detenidos, Vladislav Victorson y Anna Bernstein de Ramat Gan fueron reclutados vía Telegram. A cambio de criptomonedas, publicaron propaganda contra el primer ministro Netanyahu, incendiaron vehículos e intentaron fabricar un explosivo. Victorson incluso aceptó asesinar a alguien por 130.000 dólares.
Moti Maman, de 72 años y residente de Ashkelon, fue acusado de espiar para Irán y planear asesinatos de funcionarios israelíes. Viajó a Irán clandestinamente para reunirse con agentes de inteligencia, quienes le pidieron realizar varias tareas, aunque su demanda de un millón de dólares fue rechazada.
Los servicios iraníes utilizan redes sociales para reclutar israelíes para misiones de espionaje. Aunque algunas operaciones parecen limitadas, pueden causar daños significativos a la seguridad nacional. Muchos israelíes ignoraron o no informaron propuestas sospechosas en redes sociales, mientras otros aceptaron misiones para Irán.
La información proviene de un artículo es del Dr. Avner Barnea, investigador en el Centro de Estudios de Seguridad Nacional de la Universidad de Haifa y ex oficial de la ISA.