El ex Presidente y dirigente cocalero de Bolivia, está siendo juzgado por mantener relaciones sexuales con menores de edad. Hoy dijo que sus seguidores harán un “levantamiento” y las Fuerzas Armadas “se amotinarán” si es detenido
Evo Morales, ex presidente de Bolivia, ha intensificado sus declaraciones sobre una posible detención en el caso donde se le acusa de estupro y tráfico de personas. Morales advirtió que, de ser arrestado, sus seguidores llevarían a cabo un “levantamiento” y las Fuerzas Armadas podrían “amotinarse”. Esta situación ha generado tensiones significativas en el país, con Morales destacando que ha recibido audios de militares y policías que indican un posible motín debido a cambios rápidos en el mando.
Morales, quien se encuentra atrincherado en Cochabamba, su bastión sindical, ha instado a sus simpatizantes a bloquear las principales rutas del país en respuesta a una posible orden de aprehensión. Este bloqueo, según Morales, podría ser solo el inicio de una rebelión más amplia si la Justicia decide detenerlo. Además, ha acusado al gobierno de intentar asesinarlo en un incidente reciente, afirmando que agentes del Estado dispararon contra su vehículo.
Por otro lado, la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, ha asegurado tener “pruebas materiales” contra Morales en el caso de trata y estupro, lo que ha intensificado la situación judicial del ex mandatario. Mientras tanto, el gobierno ha iniciado maniobras para liberar las rutas bloqueadas, lo que ha llevado a enfrentamientos violentos en algunas áreas.
En medio de estas tensiones, Morales ha descartado huir del país, afirmando su intención de quedarse y luchar junto a su pueblo. La situación sigue siendo delicada, con pérdidas económicas significativas y un clima de inestabilidad política que amenaza con escalar aún más.