Esta mañana, aparecieron en las calles carteles con la imagen de la vicepresidenta Victoria Villarruel, lo que provocó un impacto inmediato. Desde su entorno, se apresuraron a desmarcarse de la situación, afirmando: “Es una práctica de la vieja política poner carteles en la calle para incentivar conflictos. Y nosotros no somos la vieja política”.
Los afiches, que muestran una fotografía de Villarruel, llevan la leyenda “Dios, Patria, Justicia Social. La agenda de la Patria”. En ellos, se pueden ver las Islas Malvinas en celeste y blanco, la Virgen de Luján, una escarapela y, en el centro, con letras grandes, la frase “Victoria Conducción”. La firma es del Movimiento Nacional Justicialista y de una agrupación llamada José Ignacio Rucci. Los carteles fueron colocados alrededor del Congreso de la Nación, destacándose uno en la Avenida Rivadavia al 1900.
Un detalle que resalta en los afiches es la inclusión de imágenes de figuras históricas como José de San Martín, Juan Manuel de Rosas, Juan Domingo Perón y el ex coronel y líder carapintada Mohamed Alí Seineldín, quien fue condenado por alzamientos militares contra los gobiernos de Raúl Alfonsín y Carlos Saúl Menem. Esta carga simbólica añade un nivel de intencionalidad a la aparición de los carteles.
Desde las oficinas de Villarruel, se distancian de la pegatina: “Nunca haríamos algo así”, afirmaron, sugiriendo que la colocación de los carteles podría tener como objetivo enrarecer el clima de distensión que se había registrado esta semana en la escalada de tensiones entre la vicepresidenta y Javier Milei. A pesar de haber experimentado una crisis institucional, ambos lados habían mostrado gestos de acercamiento, deteniendo los cruces verbales.