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La entrevista con Ricardo Auer, especialista en relaciones internacionales y profesor de la Escuela Superior de Guerra, ofrece un análisis profundo de los cambios geopolíticos actuales y sus implicancias globales. Durante el diálogo con Federico Poli en la Once Diez, se abordaron temas cruciales como la guerra entre Rusia y Ucrania, el papel de la OTAN, las tensiones internas en Europa y la influencia de Donald Trump en la política internacional.
Principales puntos tratados:
- La guerra entre Rusia y Ucrania
Auer destacó que, aunque Rusia inició la invasión, el conflicto tiene raíces más profundas en el avance estratégico de la OTAN hacia el este. Según el especialista, esta expansión fue un factor clave que desencadenó la respuesta militar rusa. Además, se debatió sobre los límites económicos y militares de Vladimir Putin y la verdadera capacidad de Rusia para sostener el conflicto a largo plazo. - El papel de Europa en el conflicto
Auer criticó la postura europea, señalando que, a pesar de las declaraciones de paz, ciertos líderes europeos podrían estar prolongando el conflicto. Alemania, en particular, enfrenta desafíos económicos y sociales que afectan su rol como líder industrial, mientras que Italia parece estar adoptando una postura más abierta hacia la negociación, lo que refleja una posible transición en la alineación europea. - La influencia de Donald Trump
Según Auer, Trump juega un papel decisivo en la política global. Su enfoque proteccionista no solo altera las dinámicas políticas internas en Estados Unidos, sino que también impacta en sus socios comerciales y alianzas internacionales. Su posible retorno al poder podría acelerar ciertas resoluciones o reconfigurar alianzas estratégicas. - El Ártico y Groenlandia en el contexto geopolítico
La conversación también abordó la importancia estratégica del Ártico y Groenlandia para Estados Unidos, destacando su relevancia en el marco de las tensiones globales y la competencia por recursos.
Conclusión:
Ambos coincidieron en que el mundo está atravesando un período de transiciones significativas, marcado por ciclos históricos de tensión y paz. Estos cambios redefinirán las alianzas y los equilibrios de poder en los próximos años, con actores clave como Rusia, Europa, Estados Unidos y China desempeñando papeles determinantes en el devenir global.
