Buenos Aires, 8 de abril de 2025-Total News Agency-TNA- El mercado financiero argentino experimentó una notable reversión de tendencia durante la jornada de hoy, influenciado por un cambio drástico en Wall Street. El índice tecnológico Nasdaq cerró con una caída del 2,2%, lo que arrastró al S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que pasó de registrar un incremento cercano al 4% a cerrar con una disminución del 1,7%. Este movimiento también se vio reflejado en el riesgo país, que momentáneamente superó la barrera de los 1.000 puntos básicos, tras una leve disminución en las primeras horas de la mañana.
El cambio en la dirección del mercado argentino coincide con un giro en los mercados internacionales, donde las acciones locales comenzaron a perder sus avances poco después del mediodía. El panel de acciones líderes de la Bolsa porteña se situó por debajo de los 2 millones de puntos, alcanzando un total de 1.990.621 unidades, la cifra más baja desde el 11 de noviembre del año pasado.
Los bonos soberanos en dólares también experimentaron una reversión significativa. Tras un aumento del 1,3% en la mañana, finalizaron la jornada con una caída del 0,7%. La atención del mercado se centró especialmente en las negociaciones entre el Gobierno de Javier Milei y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington, donde se discute un posible nuevo acuerdo crediticio por 20.000 millones de dólares.
Durante la mañana, los ADR argentinos mostraron aumentos de hasta el 8%, impulsados por el comportamiento positivo de Wall Street, pero al cierre, las ganancias se desvanecieron. Acciones como Ternium, Cresud y Edenor fueron las más afectadas, con caídas del 7,2%, 6,3% y 6,2%, respectivamente.
El riesgo país, elaborado por JP Morgan, mostró un comportamiento errático, comenzando con una disminución de 21 unidades hasta los 954 puntos básicos, pero alcanzando un máximo de 1.009 puntos por la tarde para concluir en 978 puntos. Este indicador permanece en sus niveles más altos desde finales de octubre.
El contexto externo, marcado por las repercusiones de la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de imponer nuevos aranceles comerciales, ha generado una fuerte volatilidad en los mercados globales. Aunque se registró un rebote técnico en los índices de Estados Unidos, Europa y Asia, que alcanzaron aumentos de cerca del 4% este martes, no logró sostenerse.
A pesar de que antes del mediodía la agencia Reuters informaba sobre una “oxigenación parcial” del mercado argentino tras las severas caídas de los últimos días, este rebote perdió impulso rápidamente. El economista Mariano de Rosa destacó que el mercado sigue con atención las conversaciones entre el gobierno de Trump y la Unión Europea sobre los aranceles, mientras circulan rumores que generan más incertidumbre que claridad.
Las reservas internacionales del país continúan debilitándose, situándose por debajo de los 25.000 millones de dólares, el nivel más bajo en catorce meses. En lo que va del año, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) ha sacrificado aproximadamente 4.900 millones de dólares para contener la volatilidad cambiaria, bajo el esquema de restricciones conocido como “cepo”.
Un analista del Banco Macro subrayó la importancia de concretar lo antes posible el nuevo acuerdo con el FMI, ya que la continua pérdida de reservas genera más dudas en el mercado. Además, se destacó que el volumen del primer desembolso del eventual programa será crucial para determinar si el BCRA puede recuperar su capacidad de intervención.
La incertidumbre sobre el futuro del acuerdo con el FMI, combinada con la exposición de Argentina al nuevo escenario comercial global, ha impactado también en las proyecciones macroeconómicas. Una encuesta del BCRA reveló que los analistas han ajustado sus previsiones de inflación para este año, elevándolas del 23,4% al 27,5%, y han aumentado levemente la expectativa de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 4,8% al 5%.
En el ámbito internacional, los índices bursátiles de Estados Unidos han frenado su recuperación tras el vencimiento del plazo para que China retirara sus aranceles de represalia, sin señales de retroceso por parte de Beijing. Esto ha generado una nueva escalada en el conflicto comercial, con un arancel del 104% sobre productos chinos que entrará en vigencia esta medianoche en Nueva York.
La situación se ha vuelto más incierta debido a la circulación de versiones contradictorias en redes sociales, donde se afirmaba erróneamente que los aranceles ya estaban en vigor. Según información confirmada, los nuevos tributos comenzarán a aplicarse a partir de la medianoche del martes (hora del Este), dejando al mercado en una zona de indefinición.
Este episodio se suma a un clima de tensión generado por la advertencia previa del presidente Trump, quien amenazó con aranceles del 50%, recibiendo como respuesta un mensaje de China que prometió “luchar hasta el final” y tomar nuevas medidas si se concretaban las sanciones. Este contexto ha reactivado la volatilidad y debilitado el rebote de los mercados globales.