En línea con las recomendaciones y las medidas que destacó el FMI, en su staff report, el Gobierno Nacional profundizó la flexibilización para pagar importaciones, sin embargo, por la presión que generan sobre las reservas, todavía no se habilitó el pago anticipado; la medida que el sector apunta como “clave” hacia la normalización en materia de giros al exterior.
“Esta medida es muy importante y positiva. Poco a poco el comercio exterior vuelve a la normalidad”, señaló Yanina Lojo, consultora en Comercio internacional y destacó que a través de las últimas comunicaciones del Banco Central quedó establecido el “pago a la vista”.
Esta opción acorta los plazos ya que el giro al exterior se habilita contra la presentación de documento de transporte para todas las operaciones que realizan las mipyme y, en el caso de bienes de capital, el monto del pago anticipado se incrementa y se incluye el pago anticipado.
“Si bien muchas pyme necesitan que se habilite el pago anticipado para todo tipo de bienes, la reducción de plazo reduce el costo de las operaciones por la necesidad de buscar financiamiento”, explicó Lojo y dijo que “algunos proveedores estarán más dispuestos a realizar la venta”.
La flexibilización de pagos con dólares oficiales, es lo que el sector importador estaba esperando para dar por cumplida la promesa del gobierno que encabeza Javier Milei para darle más fuerza las medidas de facilitación y desburocratización que viene ejecutando la Secretaria de Industria y Comercio.
A raíz, de esto, desde diciembre de 2024, la balanza de intercambio comercial comenzó a ajustar el superávit, por el efecto de mayores importaciones tanto desde países limítrofes como de China, principal origen de las compras de la argentina al exterior.

Ahora, con mejores condiciones para efectuar pagos, el comportamiento de las importaciones será un punto de atención en el sostenimiento del esquema de bandas que anunció el Gobierno, y que busca que el dólar flote hasta los $ 1400 para evitar la sangría de reservas que, en las últimas semanas, demandó de u$s 3000 millones al Central.
Barrera de entrada
Por lógica, el nivel de importaciones debería aumentar, generando más inflación en las góndolas -por el alza de bienes e insumos en torno al 40%- y más demanda de reservas al BCRA.
El mayor flujo de exportaciones que Economía espera por la mejor competitividad que asumirá el precio del dólar en la liquidación de ventas al exterior -sin dólar blend-, compensaría.
En cambio, en las expectativas del sector privado y posiblemente del equipo económico también, existe otra variable que actuará como depuradora: el bolsillo.

En marzo, según Focus Market, el consumo masivo cae 1,6% respecto de febrero y pierde 7,6% en la comparación interanual.
“El consumo no está teniendo el mismo crecimiento que la economía en su totalidad”, señaló Damián Di Pace, directo de Focus Market, y aseguró que “el techo del precio mostrador lo pone el piso del salario e ingreso ante las nuevos correcciones en góndola”.
Aun así, en línea con comentarios que ratifican empresarios dedicados a la importación, Di Pace plantea que parte de la inflación que saltó a 3,7%, según el último dato del Indec, responde a “adelantamiento de eventual corrección cambiaria ante el acuerdo con FMI que comenzó a correr hacia mediados del mes pasado”.
Por eso, si bien en off de record, los importadores aseguran que a partir de lunes “no queda otra que aumentar los precios” y otros confirman que la remarcación inició 10 días atrás, la pérdida de poder adquisitivo que se acentuara con la depreciación del peso, puede significar un techo para el alza de importaciones.

Fuentes del sector privado, aseguran que el clima que se vive es el de “fin de fiesta” por las mayores dificultades para colocar productos en el mercado interno. Incluso, uno de los forwarders más representativos de la actividad, reconoció a este medio que los grandes supermercados no están importando ya que “la gente sólo compra alimentos” en comercios de gran superficie.
Según explico, el alza de importaciones lo impulsan pymes, distribuidores de marcas oficiales, y particulares que buscan oportunidades de negocio por el escenario de mayor apertura.
En números de IntegraComex, en el último año las compras al exterior de bienes de consumo se dispararon en enero de u$s 4.478 millones a u$s 6.375 millones; en febrero, de u$s 3.700 a u$s 5.863 millones; y en marzo de u$s 4.088 millones a u$s 5.976 millones.
Aunque en relación a los números del 2024, las compras al exterior representan un boom, “se estabilizan”, planteó Eduardo Rotbard, titular de la firma especializada en seguimiento aduanero y marcó que “marzo debería haber sido un mes más importante pero prácticamente no hubo novedades respecto a febrero”.
Fuente El Cronista