Buenos Aires, 25 de abril de 2025 – Total News Agency-TNA- El Gobierno de Argentina ha decidido implementar una serie de reformas en el sistema de control de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) tras la polémica generada por la visita del exvicepresidente de Irán, Shahram Dabiri, en marzo, que pasó inadvertida en los protocolos de seguridad. Desde este espacio nos atrevemos a sugerir algo sencillo, los agregados de inteligencia, cónsules y otros, deberían leer los diarios locales para estar al tanto de quienes son Presidentes, Vicepresidentes, etc…para empezar, al menos. Irán es un país cerrado, pero la propaganda oficial tambien informa.
Informaron que se añadirán nuevas etapas al proceso de autorización de entrada de extranjeros al país. El Secretario de la SIDE, Sergio Neiffert, está trabajando en la ampliación de los métodos de análisis de perfiles, incorporando al procedimiento equipos del Servicio de Inteligencia Argentino (SIA), la Agencia de Seguridad Nacional (ASN) y la Agencia Federal de Ciberseguridad (AFC). Recientemente, se llevó a cabo una reunión clave entre los altos directores de la estructura, que también contó con la participación de Diego Kravetz, jefe de operaciones de Inteligencia.
Desde el Gobierno se reconocen errores en los chequeos de seguridad, y aunque se consideró la posibilidad de despedir personal, se optó por fortalecer el sistema existente. Además, se anunció una modificación en el formulario para la obtención de visas argentinas, que es gestionado por los consulados y embajadas del Ministerio de Relaciones Exteriores. En este nuevo formato se incluirán preguntas adicionales, como si el solicitante ocupa algún cargo público. Cabe recordar que Dabiri obtuvo una visa de turista acreditando su profesión de médico, sin mencionar su posición en el gobierno del presidente Masud Pezeshkian.
Asimismo, el Gobierno argentino busca establecer chequeos más rigurosos entre la SIDE y las agencias de inteligencia de Estados Unidos (CIA), Israel (Mosad) e Italia (AISE). Esta medida se enmarca dentro de los procedimientos que Argentina aplica para obtener información en países donde no cuenta con una red de agentes.
En otro orden de cosas, el Ejecutivo ha admitido la complicada situación del gendarme Nahuel Gallo, quien se encuentra detenido en Venezuela desde el 8 de diciembre, donde Argentina carece de un agregado militar. Según los informes recibidos por la secretaría, Gallo está identificado en el territorio, y el Gobierno busca reanudar negociaciones diplomáticas para asegurar su liberación.
Por último, desde la Casa Rosada se indicó que se están evaluando adquisiciones de nuevo equipamiento tecnológico para la SIDE en el mediano plazo. Estos productos son parte de los $100.000 millones que el oficialismo había planeado adquirir mediante un DNU, pero que fueron devueltos tras el rechazo del Congreso. “Incorporaremos también producción nacional”, afirmaron.
El Gobierno continúa con su agenda de reformas estructurales en la SIDE, junto con la reestructuración del personal que ingresó durante la gestión kirchnerista. Además, se prevé la inclusión de dos países africanos en la lista de “sospechosos” y la posible exclusión de Emiratos Árabes de dicha lista.