El dolor de subdirectora de la CIA al descubrir que su hijo desaparecido murió luchando por Rusia en Ucrania
Washington D.C., 27 de abril de 2025 —Total News Agency-TNA-Una investigación del medio independiente ruso iStories reveló hoy que Michael Gloss, el hijo de 21 años de Julianne Gallina Gloss, subdirectora de Innovación Digital de la CIA, combatió en secreto junto a las fuerzas armadas rusas en Ucrania, donde perdió la vida en abril de 2024 bajo circunstancias que permanecieron ocultas hasta ahora. Las imágenes exclusivas difundidas muestran al joven vestido con uniforme de camuflaje y compartiendo con soldados rusos en lo que parece ser una base militar, generando conmoción en círculos políticos y diplomáticos estadounidenses. Según confirmaron fuentes cercanas a la familia, los padres de Michael solo supieron de su muerte en junio pasado a través de un comunicado del Departamento de Estado que omitía detalles clave sobre su participación en el conflicto, limitándose a informar que había fallecido por “heridas de guerra” en la región de Donetsk.

La versión oficial proporcionada por la CIA en un escueto comunicado señala que la familia Gallina-Gloss “enfrentó una tragedia personal inimaginable” y recalca que el caso no representa un “asunto de seguridad nacional”, aunque analistas consultados por esta agencia sugieren que el escenario podría haberse tornado delicado si las autoridades rusas hubieran descubierto a tiempo el vínculo familiar del joven con una de las máximas figuras de la inteligencia norteamericana. Larry Gloss, padre de Michael y veterano de la Marina estadounidense que participó en las operaciones Tormenta del Desierto e Iraq Freedom, describió a su hijo ante el Washington Post como un “pacifista convencido” con profundas convicciones humanitarias, aunque admitió que su historial de problemas de salud mental —incluyendo el abandono de tratamientos médicos años atrás— pudo influir en su decisión de unirse al ejército ruso.
Los últimos movimientos del joven, reconstruidos mediante registros de viaje y comunicaciones familiares, indican que en enero de 2023 abandonó su residencia en Virginia para realizar un periplo por Europa y Asia Menor que incluyó trabajos agrícolas en Italia y labores de reconstrucción tras los terremotos de Turquía. Su rastro se pierde temporalmente cuando ingresa a Georgia, donde según testigos participó en encuentros de la contracultura Rainbow Family, antes de cruzar hacia Rusia en septiembre de ese año con el pretexto de visitar amigos. Meses después, en diciembre de 2023, habría sido enviado al frente ucraniano sin que sus padres —quienes llegaron a rastrear su ubicación hasta el pueblo militar de Avangard— lograran disuadirlo pese a sus reiteradas negativas sobre cualquier enrolamiento castrense.

Entre los aspectos más sensibles del caso destaca la confesión póstuma de Michael, recuperada por iStories de mensajes privados, donde expresaba su deseo de obtener la ciudadanía rusa y desarrollar un sistema de purificación de agua para comunidades marginadas, proyecto que según él contaría con apoyo gubernamental. “Era clásico en Michael: idealismo puro mezclado con esa rebeldía contra todo sistema establecido”, lamentó su padre, quien reconoció haber temido durante meses que las autoridades de Moscú utilizaran a su hijo como “peón propagandístico” al descubrir el cargo de su madre. La familia Gloss celebró un funeral privado en diciembre de 2024 sin revelar el contexto bélico del deceso, optando por destacar en el obituario su “espíritu guerrero al servicio de los desfavorecidos”.

El impacto de la revelación ha reabierto debates en Washington sobre los protocolos de seguimiento a familiares de altos funcionarios en zonas de conflicto, mientras expertos en psicología militar analizan cómo casos como este exponen fallas en los filtros de reclutamiento de mercenarios extranjeros. Por ahora, la Casa Blanca se ha limitado a calificar el incidente como “un drama humano ajeno a la política exterior”, aunque fuentes del Capitolio anticipan interrogantes inevitables sobre posibles brechas de inteligencia. En paralelo, circulan en redes sociales fotografías del joven en etapas anteriores —incluyendo una donde posa con una llamativa capa— que contrastan brutalmente con las últimas imágenes conocidas, donde aparece armado y sonriente junto a su unidad rusa.
Contexto: La subdirectora Gallina, especialista en ciberseguridad con 25 años de carrera, asumió su actual puesto en 2022 liderando proyectos de inteligencia artificial para la agencia. Su marido, Larry Gloss, fue condecorado dos veces por acciones en combate durante su servicio activo (1990-2005). Michael, su único hijo, estudiaba ingeniería ambiental antes de abandonar la universidad en 2022 por lo que sus padres atribuyen a “una crisis existencial agravada por trastornos no tratados”.