Buenos Aires, 20 de mayo de 2025 – Total News Agency-TNA- El Foro de Generales Retirados, encabezado por el general de brigada (R) José Luis Figueroa, lanzó duras críticas contra la conducción de la obra social de las Fuerzas Armadas (IOSFA), que asiste a más de 550 mil afiliados en todo el país. Figueroa advirtió sobre una crisis “financiera y operativa” sin precedentes, acusó a la actual administración de mala gestión y exigió medidas urgentes al Ministerio de Defensa. Desde el organismo, su titular Roberto Fiochi respondió que no hay quiebra, sino un desbalance estructural, agravado por factores económicos nacionales y problemas históricos no resueltos.
El conflicto tomó dimensión pública tras la difusión de un comunicado del Foro Argentino de Defensa (FAdA), que expresó su “profunda preocupación ante la grave situación que atraviesa IOSFA”, y denunció una deuda superior a los 160 mil millones de pesos, junto a un déficit operativo mensual de aproximadamente 15 mil millones. El texto pidió al ministro de Defensa, Luis Petri, que intervenga para reestructurar el organismo, señalando que la crisis “golpea directamente a la familia militar”.
Acusaciones de mala gestión y advertencias sobre la venta de activos
José Luis Figueroa fue aún más directo: “Hace 18 meses la obra social estaba equilibrada. Hoy, con un déficit consolidado de 163 mil millones de pesos y un rojo mensual de 15 mil millones, no hay salida posible sin un cambio de rumbo”. El exjefe militar advirtió además sobre la posible venta de activos patrimoniales como hoteles y farmacias para cubrir el déficit, algo que consideró inadmisible. “No pueden vender lo que es nuestro. Son bienes adquiridos con los aportes de la familia militar. Las farmacias no tienen medicamentos y los hoteles están mal administrados. No pueden tapar el desastre vendiendo patrimonio”.
En ese sentido, Figueroa afirmó que el origen del problema es político y administrativo, y no económico: “Recibieron la gestión con 25 mil millones en caja y hoy hay un déficit que supera los 160 mil millones. No ajustaron el presupuesto ante la devaluación anunciada por el presidente Milei ni previeron el retraso en la equiparación salarial. Eso es impericia”.
La respuesta de IOSFA: “No hay quiebra, hay distorsiones y problemas heredados”
Desde IOSFA, Roberto Fiochi desmintió categóricamente las versiones sobre una supuesta quiebra. “Estamos lejos de una quiebra. Hay dificultades económicas, sí, pero las críticas parten de personas que no manejan términos técnicos ni comprenden el funcionamiento del sistema de salud en la Argentina. El incremento de los costos en insumos y prestaciones médicas ha sido exponencial, mientras que los ingresos del IOSFA, ligados a sueldos y pensiones militares, no siguieron el mismo ritmo”, explicó el funcionario.
Fiochi detalló que al cierre de 2024 el organismo tenía un pasivo de aproximadamente 120 mil millones de pesos y una disponibilidad cercana a los 29 mil millones, destinados al pago de prestaciones. “El déficit se volvió crónico desde abril de 2024, con ingresos que rondaban los 48 mil millones y egresos que superaban los 50 mil. Esto se repitió mes tras mes”, señaló.
Venta de activos y crisis de gestión: ¿Solución o sacrificio?
Una de las principales críticas apunta a la posibilidad de desprenderse de hoteles y farmacias propiedad del IOSFA. Al respecto, Fiochi reconoció que se están evaluando alternativas como la venta, tercerización o devolución de algunos inmuebles a las Fuerzas Armadas. “Nos encontramos con hoteles y farmacias que generan pérdidas, y que se están financiando con fondos que deberían destinarse a prestaciones médicas. En cualquier cadena privada serían negocios rentables. En nuestro caso, el régimen de empleados públicos vuelve insostenible su administración”.
Actualmente IOSFA posee 14 complejos turísticos y 33 farmacias distribuidas en todo el país. Para Fiochi, el problema es de fondo: “IOSFA es un conglomerado complejo, con 550 mil afiliados, pero sigue funcionando bajo estructuras burocráticas del Estado. No se puede sostener esta multiplicidad de servicios con un modelo que no es eficiente. Tenemos que priorizar la salud”.
El debate sobre la gestión militar
Otro punto sensible es la conducción del organismo. Figueroa sugirió que la falta de personal con experiencia específica en salud y administración contribuyó al colapso del sistema. En respuesta, Fiochi aclaró que más de dos tercios del personal de IOSFA son militares, y que la actual gestión cuenta con el respaldo de las Fuerzas Armadas en actividad. “Hay quienes quisieran que la obra social vuelva a estar completamente en manos de oficiales retirados, pero esa no es una garantía de eficiencia. IOSFA necesita profesionalismo, no nostalgia institucional”, sostuvo.
¿Es sostenible el modelo actual?
Para el presidente del organismo, más allá de la coyuntura financiera, el modelo actual plantea desafíos estructurales. “A diferencia de las obras sociales sindicales, que derivan a sus jubilados al PAMI, IOSFA conserva a los retirados, que son los que más consumen servicios médicos. Pero los aportes no se ajustan adecuadamente al costo real. Además, hay ítems salariales no remunerativos sobre los que no se hacen aportes, y esto genera un desfinanciamiento persistente”, explicó Fiochi.
Por ello, la solución no pasa por un rescate inmediato, sino por una revisión actuarial profunda, mejoras en la recaudación, informatización de los procesos, control de prestaciones, y eventualmente, un aporte extraordinario del Estado nacional.
Una puja con trasfondo político
El cruce entre militares retirados y la actual gestión de IOSFA también tiene un trasfondo político. Fiochi afirmó que muchas de las críticas responden a “ambiciones personales” de sectores que buscan recuperar espacios de poder: “Algunos creen que todo tiempo pasado fue mejor. Pero la realidad es que esta obra social arrastra problemas desde hace años y lo que antes se tapaba con emisión monetaria, ahora sale a la luz”.
En medio del conflicto, ambos sectores coinciden en que la obra social atraviesa una crisis seria. La diferencia radica en las causas y las salidas posibles. Mientras el Foro de Generales apunta a una gestión ineficaz y exige una intervención directa del Ministerio de Defensa, el Gobierno busca ordenar las cuentas sin recurrir a medidas drásticas que afecten las prestaciones de salud.
El debate sigue abierto y la resolución será clave no solo para el futuro del IOSFA, sino también para la atención de medio millón de integrantes activos y retirados de las Fuerzas Armadas y fuerzas de seguridad del país.
TNA