Washington, 26 de junio de 2025 – Total News Agency-TNA-Una veintena de legisladores judíos del Congreso de Estados Unidos exigieron explicaciones formales al secretario de Defensa, Pete Hegseth, por el reciente nombramiento de Kingsley Wilson como subsecretaria de prensa del Pentágono. En una carta enviada este martes, los miembros demócratas del House Jewish Caucus manifestaron su preocupación por los antecedentes de Wilson, a quien acusan de haber promovido teorías conspirativas y de haber difundido retórica asociada al neonazismo.
El texto, firmado por 20 representantes, señala que Wilson expresó públicamente su respaldo a la teoría del “Gran Reemplazo”, una ideología de raíz supremacista blanca que sostiene que existe un plan deliberado para sustituir a las poblaciones de origen europeo mediante la inmigración. Según el comité, la funcionaria habría además elogiado en redes sociales a movimientos de extrema derecha y reproducido consignas vinculadas a grupos neonazis.
La polémica se intensificó a raíz de publicaciones que Wilson habría realizado en 2024, en las que hacía referencia al caso Frank —en alusión a Ana Frank— utilizando argumentos similares a los empleados por sectores negacionistas. Organizaciones como la Liga Antidifamación (ADL, por sus siglas en inglés) y el Comité Judío Estadounidense (AJC) condenaron abiertamente su designación y alertaron sobre los riesgos que implica su presencia en un cargo de alto perfil dentro del Departamento de Defensa.
La misiva enviada a Hegseth está encabezada por la representante californiana Laura Friedman, presidenta del Jewish Caucus, e incluye las firmas de los copresidentes Jerry Nadler (Nueva York) y Brad Schneider (Illinois), junto a otros 17 legisladores demócratas. En ella, los firmantes exigen conocer qué controles se aplicaron durante el proceso de selección y qué medidas se han adoptado frente a las denuncias formuladas por organizaciones de derechos humanos y la comunidad judía.
“Nos preocupa profundamente el mensaje que este nombramiento transmite respecto al compromiso del Departamento de Defensa con la lucha contra el extremismo, el antisemitismo y el discurso de odio”, afirma el documento. Los legisladores también piden que se revise el procedimiento mediante el cual se aprueban este tipo de nombramientos, dada la creciente incidencia de ideologías extremistas en ámbitos institucionales.
Hasta el momento, ni Wilson ni el Pentágono han emitido comentarios públicos sobre el contenido de la carta. Desde que asumió su cargo, Wilson ha evitado responder preguntas relacionadas con sus publicaciones pasadas. El caso generó un intenso debate en Washington, donde sectores de la oposición republicana restaron importancia a las acusaciones, mientras que organizaciones judías y de derechos civiles exigen su renuncia inmediata.
El episodio se produce en un contexto de creciente preocupación por la penetración de ideologías radicales en instituciones clave del gobierno federal, en especial en áreas sensibles como defensa, seguridad e inteligencia. Grupos de monitoreo como el Southern Poverty Law Center han alertado sobre la normalización del discurso extremista en sectores vinculados a la administración pública.
La respuesta oficial del secretario Hegseth será clave para determinar el futuro de Kingsley Wilson en el cargo, así como para valorar el compromiso del Pentágono con los estándares éticos e institucionales en la lucha contra el odio y la discriminación.