Por Daniel Romero
Buenos Aires, 26 de junio de 2025 – Total News Agency–TNA–.El reciente debate en Estados Unidos sobre considerar al narcotráfico mexicano como terrorismo revela paralelismos con la estrategia aplicada contra Irán, que el año pasado enfrentó bombardeos preventivos por parte de Washington e Israel. Esto refleja una lógica de acción extraterritorial amparada en el supuesto derecho a la autodefensa americana.
Delitos y designaciones legales
En febrero de 2025, la administración Trump clasificó a ocho cárteles mexicanos —incluidos Sinaloa y Jalisco Nueva Generación— como “Foreign Terrorist Organizations” (FTO), acusándolos de causar la muerte de miles de estadounidenses con fentanilo y violencia extrema. Consecuentemente, investigadores federales en EE. UU. presentaron cargos por “narcoterrorismo” contra miembros del Cártel de Sinaloa, como Pedro Inzunza Noriega y su hijo, bajo acusaciones de tráfico de fentanilo para financiar actos violentos.
Precedentes globales y mecanismos operativos
Simultáneamente, EE. UU. desplegó drones de vigilancia sobre territorio mexicano con autorización de la CIA y el DHS, una táctica similar al uso de inteligencia remota en campaña contra Irán . Aunque el Pentágono aclaró que, aunque no posee autorización legal formal para lanzar ataques letales, el marco legal basado en el artículo 51 de la ONU permitiría represalias si los cárteles atentan directamente contra EE. UU. o sus ciudadanos.
Expertos reseñan similitudes con la doctrina aplicada a Irán: uso de designación FTO para justificar operaciones extraterritoriales, evaluación de daños en infraestructuras críticas y posibilidad de ataques quirúrgicos con drones suicidas o MQ‑9 Reaper .
Respuesta política y soberanía mexicana
El Gobierno de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, rechazó la designación de los cárteles como terrorismo y advirtió un riesgo de “invasión” a la soberanía mexicana, defendiendo la cooperación mediante inteligencia y esfuerzos judiciales conjuntos. Reclamó además reformas constitucionales para proteger su integridad territorial frente a acciones extraterritoriales estadounidenses.
Impacto potencial y dilemas estratégicos
El reconocimiento del narcotráfico como terrorismo transforma el enfoque global: se legitiman intervenciones selectivas, se abre la puerta a acciones dron-based estilo “loitering munition” y se amplían los argumentos legales para uso de fuerza, como ocurrió en Irán. Sin embargo, esto genera tensiones diplomáticas y riesgos de deterioro en la cooperación bilateral . Organizadores académicos advierten también sobre posibles violaciones al derecho internacional y al principio de no intervención .
La evolución normativa, técnica y estratégica con que EE. UU. redefine el narcotráfico como terrorismo refleja el patrón ya observado con Irán: alertas, diseño FTO, vigilancia y posible uso de drones letales. El espejo iraní pone en evidencia el alcance y consecuencias de este enfoque, con México en el centro de un debate sobre la soberanía, la cooperación y los límites del poder estadounidense.