Londres, 18 de julio de 2025 – Total News Agency-TNA-El gobierno británico impuso este viernes las sanciones más severas de su historia contra agentes de inteligencia rusos, en un movimiento sin precedentes que apunta a debilitar la capacidad operativa del Kremlin en Europa. La medida, anunciada por el secretario de Exteriores David Lammy, incluye a 18 espías y tres unidades del servicio militar de inteligencia (GRU), implicados en campañas encubiertas de ciberataques, desinformación y operaciones de desestabilización continental.
Las sanciones incluyen restricciones financieras y prohibiciones de viaje para los involucrados, en un intento por “proteger al Reino Unido de los daños provocados por la agresión híbrida de Putin”, según remarcó Lammy en un comunicado.
Entre los nombres señalados figuran Ivan Sergeyevich Yermakov y Aleksey Viktorovich Lukashev, agentes de inteligencia radicados en Moscú y vinculados al ciberataque contra los correos electrónicos de Yulia Skripal, ocurrido poco antes del envenenamiento con Novichok que afectó a ella y a su padre, el exespía Sergei Skripal, en la ciudad inglesa de Salisbury en 2018.

También fue sancionada la Unidad GRU 26165, acusada de instalar el malware “X-agent” en redes internacionales desde 2013, en una ofensiva cibernética global atribuida al Kremlin. Según el diario Daily Mail, los espías utilizaron alias e incluso se hicieron pasar por mujeres para encubrir su accionar.
Datos clave de las sanciones:
- Agentes sancionados: 18
- Unidades del GRU sancionadas: 3
- Áreas de operaciones: Reino Unido, Ucrania, Francia, África
- Metodologías: ciberataques, desinformación, operaciones de espionaje y sabotaje
Lammy afirmó que “los espías del GRU llevan adelante una campaña para desestabilizar Europa, socavar la soberanía de Ucrania y amenazar la seguridad de los ciudadanos británicos”. Y agregó: “El Kremlin no debe tener dudas: vemos lo que intentan hacer en la sombra y no lo toleraremos”.
Entre los implicados figuran también oficiales de inteligencia señalados como partícipes en el bombardeo del Teatro de Mariúpol, en Ucrania, el 16 de marzo de 2022, donde murieron centenares de civiles, incluidos niños. La acción militar rusa fue denunciada como un crimen de guerra por organismos internacionales.
Las sanciones incluyen a altos mandos del GRU vinculados a ciberataques contra Londres, Kiev y París, incluidos los intentos de sabotear los Juegos Olímpicos de París 2024.
El Reino Unido también incluyó en la lista a tres líderes de la “African Initiative”, una red de desinformación respaldada por Moscú que opera en medios digitales y redes sociales para difundir teorías conspirativas, atacar campañas sanitarias globales y amplificar la agenda política del Kremlin en el continente africano.
En suelo británico, los objetivos de las operaciones encubiertas incluyeron medios de comunicación, proveedores de telecomunicaciones, partidos políticos e infraestructuras energéticas, en lo que el Foreign Office describe como un esquema sistemático de interferencia.
Las nuevas medidas fueron celebradas por el presidente ucraniano Volodimir Zelensky, quien calificó la decisión como “esencial y oportuna” para enfrentar la escalada de agresión rusa en Europa del Este. La acción británica se suma a la presión internacional contra Moscú en medio del conflicto bélico con Ucrania, que continúa en fase activa desde febrero de 2022.
Con esta decisión, el Reino Unido refuerza su política de seguridad y reafirma su compromiso con la defensa de las democracias occidentales frente a los métodos de guerra no convencional que emplea el Kremlin. “Estas no son acciones aisladas. Son parte de una campaña más amplia del GRU”, concluyó Lammy.