Miami, 26 de julio de 2025 – Total News Agency – TNA –El Cartel de Sinaloa, la organización narcotraficante más poderosa del hemisferio occidental, vive una etapa convulsa marcada por su fractura interna y una respuesta jurídica inusitada de Estados Unidos, que amplifica la presión sobre sus estructuras de poder.
Desglose histórico y crisis interna
Con raíces en el cultivo de cannabis y amapola en Sinaloa, el grupo nació de familias campesinas como la de Pedro Avilés y Joaquín “El Chapo” Guzmán en las décadas de 1960 y 1970. Tras su rápido crecimiento, se diversificaron al tráfico de cocaína en conexión con el Cartel de Medellín, y consolidaron una red criminal cuya sofisticación actual combina producción industrial de metanfetamina y fentanilo usando precursores químicos importados de Asia.
En julio de 2024, la detención de Ismael “El Mayo” Zambada y de Joaquín Guzmán López en El Paso, Texas, provocó una ruptura decisiva: Lionel Guzmán López traicionó a su padrino, lo entregó a EE. UU. y desató una guerra interna entre las facciones heredadas: los Seguidores del Mayo (“La Mayiza”) y los herederos de El Chapo (“Los Chapitos”). Desde entonces, Sinaloa cubre una espiral de violencia con más de 883 homicidios e 1.500 desaparecidos durante el primer semestre de 2025, en contraste con 224 crímenes en el mismo periodo de 2024.
Liderazgo dividido y redes armadas
Hoy el liderazgo se reparte entre las facciones: Los Chapitos (Iván Archivaldo, Jesús Alfredo, Ovidio y Joaquín Guzmán López) y la Mayiza, liderada por Ismael Zambada Sicairos (“El Mayito Flaco”). Cada grupo dispone de estructuras armadas propias: Los Chapitos coordinan con los Ninis, Salazar, Gente Nueva y los Chimales; La Mayiza actúa junto a redes como los Antrax y los Rusos. Se menciona también a Óscar “El Panu” Medina González como lugarteniente clave del Chapitos.
Operativos de EE.UU. y estrategia antinarco
En 2025, EE. UU. intensificó su estrategia: el 9 de junio incluyó a Los Chapitos en la lista de organizaciones terroristas y aplicó sanciones financieras que congelan activos y prohíben transacciones con ellas. Un operativo de mayo logró la mayor incautación de fentanilo en la historia del país: 3 millones de pastillas, 11,5 kg de polvo, 35 kg de metanfetamina, 7,5 kg de cocaína, 4,5 kg de heroína, 49 armas y US$ 5 millones en efectivo; se detuvo a 16 miembros, incluido Heriberto Salazar Amaya, señalado como figura central del cartel.
Asimismo, operativos de la DEA y el FBI incautaron US$ 10 millones en criptomonedas en Miami vinculadas al lavado del cartel, parte de la iniciativa “Operation Take Back America”.
Alianzas y desplazamientos en producción de fentanilo
Un informe de la DEA de mayo advierte sobre una posible coalición emergente entre Los Chapitos y el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para reforzar rutas y territorios, riesgos que podrían reconfigurar el equilibrio criminal en México y EE. UU.
Internamente, en febrero de 2025 se ordenó paralizar la producción de fentanilo tras la designación terrorista del cartel; laboratorios en Sinaloa fueron desmantelados, aunque la actividad se habría desplazado a Sonora, Jalisco, Michoacán y Durango.
En Michoacán, en julio de 2025, fueron incautados 800 kg de metanfetamina tras operativos que destruyeron laboratorios y detuvieron sospechosos vinculados a figuras como Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán, mientras continúan las intervenciones en Sinaloa con más de 1.487 arrestos y 91 laboratorios afectados en nueve meses.
Perspectivas y efectos
- El Cartel mantiene una operativa robusta pese a la división interna, apoyado en una estructura flexible de células descentralizadas que permite relevar líderes y adaptarse a la presión institucional.
- La fragmentación y la violencia creciente amenazan su predominio territorial y la viabilidad de alianzas históricas.
- Las sanciones y operativos de EE. UU. buscan aislar financieramente y procesar de forma criminal-terrorista a la organización principal y sus ramificaciones, incluyendo actores vinculados al CJNG .
- La progresiva externalización de producción de fentanilo indica un cambio táctico frente a mayores controles dentro de Sinaloa.