Qué dice el documento y por qué importa
Buenos Aires, 8 de septiembre de 2025-Total News Agency-TNA-El informe de Bull Market —usina financiera que lidera el referente libertario Ramiro Marra— traza un diagnóstico de la elección bonaerense y proyecta el “día después” hasta las legislativas nacionales de octubre. Sus ejes: 1) participación históricamente baja; 2) voto de La Libertad Avanza (LLA) estable en términos netos frente a 2023, sin capturar masivamente a los ex Juntos por el Cambio; 3) un mapa legislativo provincial que casi no se mueve; y 4) un dólar mayorista que, sin un shock de oferta (regulatorio o externo), tenderá a testear el techo de la banda y a exigir respuesta de política económica. El paper añade dos afirmaciones controvertidas: que el “miedo” podría favorecer a Milei en octubre y que la boleta única minimiza el peso del aparato territorial.
Participación: el voto que no fue
La provincia votó con una concurrencia notablemente inferior a los picos de los últimos ciclos legislativos. Con el 63% de participación, Buenos Aires se ubicó por debajo de 2017 (76,8%) y 2021 (71%), y dentro de los registros más bajos desde 1983 para comicios legislativos, con el atenuante de haber desdoblado la elección provincial de la nacional. La premisa operativa del documento —“en octubre sube la concurrencia”— es plausible por estacionalidad y tracción de una elección nacional con boleta única, pero no automática: la apatía y el desencanto también pueden persistir cuando la economía no convalida mejoras palpables.
Voto opositor fragmentado y peronismo dominante
El resultado consolidó una realidad: Fuerza Patria (peronismo) ganó por más de 13 puntos a LLA-PRO y se impuso en seis de las ocho secciones, con hegemonía en 99 de 135 municipios, sobre todo en el conurbano. La oposición no peronista llegó a la elección con una oferta partida (LLA-PRO, SOMOS, opciones locales), y esa atomización limitó el “trasvasamiento” automático desde el universo 2023 de Juntos por el Cambio hacia la boleta violeta. El diagnóstico de Bull Market —“LLA no ganó en neto el voto ex JxC”— es consistente con el patrón territorial y el menú de alternativas que capturaron segmentos radicales y de centro.
Los números finos y la discrepancia metodológica
El paper sostiene que LLA “se mantuvo” respecto de 2023 y que el peronismo “cayó fuerte”. Con los datos provisorios publicados, Fuerza Patria ronda el 47,28% y LLA el 33,71%. La lectura de Bull Market parece tomar bases distintas (por ejemplo, “votos positivos” contra “votos totales”, o cortes por categoría seccional) y por eso puede divergir de los totales divulgados en prensa. En términos porcentuales, el peronismo retuvo la primera minoría con ventaja holgada; en términos absolutos, su caudal bajó respecto de 2023, pero la caída de participación general y la distribución por secciones le permitieron traducir mejor sus votos en bancas que la alianza LLA-PRO.
Legislatura bonaerense: fuerza dominante y segunda bancada
El informe enfatiza una “legislatura prácticamente sin cambio”. Los datos disponibles muestran que el peronismo amplía su control en el Senado provincial hasta el quórum propio (24 bancas), mientras que en Diputados queda con 39 (a ocho del quórum). LLA-PRO crece hasta 30 diputados y 16 senadores, consolidándose como segunda fuerza en ambas cámaras. Resultado: más gobernabilidad para la administración provincial y una oposición con volumen, pero sin números para bloquear por sí sola. La síntesis del documento —gana el peronismo, LLA suma, JxC se achica— coincide con la reconfiguración postelectoral.
Boleta única: menos “aparato”, más control ciudadano
Bull Market argumenta que la boleta única reducirá “errores de votación” y la dependencia del aparato en fiscalización. Como marco general, la BUP nacional entra en vigor en octubre y homogeneiza la oferta en una sola papeleta por mesa. ¿Implica automáticamente un sesgo a favor del oficialismo nacional? No necesariamente: la BUP disminuye la incidencia de roturas y faltantes de boletas y facilita el recuento, pero no suprime el peso de redes territoriales en movilización y logística —en especial en distritos de alta densidad— ni garantiza traslado mecánico del “voto castigo” o del “voto miedo”.
El corazón del paper: el dólar y el “techo de banda”
La tesis central: en Argentina el tipo de cambio “nunca frena solo por precio”, sino por shocks exógenos (regulatorios o de oferta), y el mercado intentará testear el techo de la banda. Desde abril rige un esquema de flotación administrada con banda móvil acordada con el FMI: el techo hoy ronda $1.470–$1.471 y el piso ~ $951. El mercado ya operó cerca de ese límite, lo que encendió la expectativa de intervención oficial. Bull Market descarta cepos nuevos, pero ve probable un “dólar soja” o mecanismos que incentiven liquidación, además de alternativas financieras (BOPREAL) y, en un extremo, apoyo externo.
Antecedentes: herramientas de “shock” que menciona el informe
El documento recorre instrumentos recientes: BOPREAL para ordenar pagos externos del sector privado; blanqueo; y, de mediar stress, eventuales adelantos de exportadores o modificaciones transitorias de derechos de exportación que mejoren el “dólar de liquidación”. Históricamente, los picos cambiarios se atenuaron con medidas de este tipo más que con “mano invisible”. La lectura es razonable: la oferta “genuina” tarda en aparecer si no hay señal de precio y/o incentivo regulatorio.
¿Apoyo del Tesoro de EE.UU.? Qué es y qué no es el ESF
El paper explora como “evento sorpresa” el Exchange Stabilization Fund (ESF) del Tesoro de EE.UU., que puede otorgar créditos o swaps a gobiernos para estabilizar monedas en coordinación con el FMI. Hay precedentes (México 1995), pero requieren decisión política de alto nivel, condicionalidad y transparencia ante el Congreso estadounidense. No es un instrumento automático ni de uso rutinario; su mención como “posibilidad” debe leerse como escenario extremo, no como base del plan.
El “miedo” como variable de voto: hipótesis discutible
El informe sugiere que “el miedo” a una “marea kirchnerista” operaría a favor de LLA en octubre. La psicología electoral incide, pero la evidencia disponible en la provincia indica que la ventaja peronista se explica por territorialidad (conurbano), oferta dividida del espacio no peronista y economía todavía áspera. La boleta única quita fricciones de papeletas, pero no revierte por sí sola esas causas. La campaña oficial debería traducir logros macro en señales micro (precios, crédito, poder de compra) para influir en indecisos; ahí se juega si esa hipótesis gana tracción.
Qué mirar de aquí a octubre (hoja de ruta operativa)
- Tipo de cambio: si el mayorista toca reiteradamente el techo de banda, la respuesta más eficiente podría ser ajustar parámetros (banda o incentivo a liquidaciones) antes que vender reservas sin horizonte.
- Futuros: la sobrecarga de posiciones largas y backwardation corta serían señales de riesgo; las ventas oficiales coordinadas en plazos breves tienen mayor potencia que a >60 días.
- Pesos/tasas: anclar tramo corto (≤90 días) y preservar coberturas CER 2026 Q1/Q2 como “seguro” de shock; el carry largo luce frágil si la banda queda bajo presión.
- Bonos en dólares: paciencia táctica; gatillos de TIR (25–27% para Bonares; ~20% para Globales) como guía de acumulación escalonada, si octubre despeja incertidumbre.
- Comunicación económica: la consistencia de mensajes (fiscal, monetario y cambiario) será crucial para alinear expectativas y moderar la volatilidad de corto plazo.
Fortalezas y puntos ciegos del reporte
Aciertos: enfoca la dinámica realista del régimen de bandas; pondera el rol de shocks coordinados; reconoce que el “apalancamiento” financiero externo o regulatorio es el canal más probable de ordenamiento.
Omisiones o relativizaciones: sobreestima el impacto electoral de la BUP como “ecuador” de fiscalización; subestima el peso territorial peronista y el costo social de la recesión; y no explora en detalle el riesgo político de sobreajustes simultáneos (mercado de cambios, precios regulados y tasas) en semanas preelectorales.
Línea de fondo
Leída en clave electoral, la nota de Bull Market anticipa una competencia más abierta en octubre si sube la participación y la boleta única reduce fricciones. Leída en clave financiera, postula que la banda cambiaria será probada y que el Gobierno deberá elegir entre incentivos a la oferta, ajustes de banda o auxilio externo antes que dilapidar reservas. Entre ambas lecturas se juega el tramo decisivo: sin un puente visible entre macro y bolsillo, la política seguirá pesando más que la técnica.