Washington, 18 octubre 2025 — Total News Agency-TNA-El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sorprendió este viernes al manifestar su interés en un hipotético túnel submarino que conecte Alaska con Rusia, luego de que un alto funcionario del Kremlin mencionara la propuesta en redes sociales. A su lado, el mandatario ucraniano Volodimir Zelenski reaccionó con evidente incomodidad y rechazó de plano la iniciativa, generando un momento de tensión diplomática durante su encuentro en la Casa Blanca.
Una idea que generó risas incómodas
“Un túnel de Rusia a Alaska. Eso es… interesante”, comentó Trump ante la consulta de los periodistas sobre el proyecto que había sido planteado un día antes por Kirill Dmitriev, enviado de economía internacional del presidente Vladimir Putin.
El líder estadounidense, visiblemente intrigado, se volvió hacia su par ucraniano para preguntarle: “¿Qué piensa de eso, señor presidente? ¿Qué le parece esa idea?”. Zelenski, en tono serio, respondió: “No estoy contento con eso”, provocando una risa incómoda en Trump y entre algunos asistentes.
Un viejo proyecto que reaparece en clave política
La propuesta, presentada en la red social X por Dmitriev, fue calificada como un “puente de paz” entre Rusia y Alaska, un concepto que, según afirmó, tiene antecedentes en la Guerra Fría. El funcionario ruso incluso compartió un gráfico con una posible ruta submarina bajo el mar de Bering, de unos 112 kilómetros de longitud, estimando su costo en 8.000 millones de dólares.
Dmitriev sugirió que el proyecto podría realizarse con la tecnología de The Boring Company, una de las empresas de Elon Musk, dedicada a la construcción de túneles y soluciones de transporte urbano. “Con la tecnología moderna de @boringcompany esto puede convertirse en un túnel Putin-Trump”, escribió el funcionario.
Tensión diplomática en plena reunión bilateral
El comentario de Trump coincidió con un momento delicado en la relación entre Estados Unidos y Ucrania. El presidente norteamericano había mantenido un día antes una conversación telefónica con Putin, en la que, según dijo, “se habían producido avances hacia la paz”. Zelenski, sin embargo, lo contradijo frente a las cámaras, al afirmar que el líder ruso “no está listo para la paz”.
El episodio dejó en evidencia las diferencias entre ambos mandatarios respecto a la estrategia frente a Moscú, y el rechazo ucraniano a cualquier gesto que pueda interpretarse como un acercamiento diplomático con el Kremlin.