Bruselas, 17 de noviembre de 2025 – Total News Agency-TNA –La presidenta de la Ursula von der Leyen, al frente de la Comisión Europea, instó este lunes a los Estados miembros de la Unión Europea a alcanzar antes de diciembre un acuerdo claro para garantizar la financiación de las necesidades militares y económicas de Ucrania para el periodo 2026-2027, estimadas en aproximadamente 135 000 millones de euros. Según la misiva enviada a los 27 gobiernos nacionales, “no hay opciones fáciles” y Europa no puede permitirse la parálisis, por vacilación o por la búsqueda de soluciones perfectas que no existen.
Von der Leyen señala que los requerimientos ucranianos presentan una dimensión “particularmente aguda”: unos 83 400 millones de euros destinados a financiar al Ejército y otros 55 200 millones para estabilizar la economía y cubrir el déficit presupuestario. El documento contempla tres grandes vías —o una combinación de ellas— para completar la financiación requerida: contribuciones bilaterales de los países miembros, emisión de deuda conjunta de la UE, y un préstamo basado en los activos rusos inmovilizados.
La primera opción se basa en subvenciones directas de los Estados miembros, contabilizadas contra sus presupuestos nacionales; la segunda implica endeudamiento de la UE con garantías estatales; y la tercera propone vincular el reembolso de un préstamo exclusivamente a la compensación que pueda efectuar la Rusia por los daños causados. Esta última fórmula podría alcanzar hasta 140 000 millones de euros y evitar la carga fiscal directa sobre los presupuestos nacionales.
El escollo más crítico para avanzar radica en la ausencia de consenso entre los veintisiete. En particular, el gobierno de Bélgica —donde se encuentran los principales activos rusos congelados en el depósito central de valores Euroclear— se muestra reticente al plan que vincula esos fondos a un préstamo para Ucrania, por temor a represalias económicas o legales de Moscú.
La misiva de la Comisión subraya que el acuerdo debe alcanzarse antes de la cumbre del Consejo Europeo de diciembre, ya que se pretende que los desembolsos comiencen en el segundo trimestre de 2026. Esta urgencia refleja la coyuntura crítica de Ucrania: la guerra con Rusia continúa sin visos inmediatos de alto el fuego, y su sistema de defensa y administración estatal requiere fondos adicionales para sostener el esfuerzo bélico y la reconstrucción simultáneamente.
Los analistas coinciden en que el tiempo juega en contra. Aunque las tres vías están sobre la mesa, la dificultad de modificar reglas presupuestarias, de obtener unanimidad en el bloque y de desactivar la resistencia interna —como la que ofrece Hungría o Bélgica— hacen que el camino sea tortuoso. Von der Leyen advierte que si no se actúa “rápidamente” el soporte a Ucrania quedará comprometido.
El trasfondo geopolítico añade presión: más allá del apoyo militar, la estabilidad de Ucrania es considerada por la UE como una línea de defensa frente a una expansión más amplia de la guerra en Europa oriental. La financiación se convierte, así, en un test de credibilidad para la Unión y para su papel global como actor estratégico frente a la agresión rusa.
En la práctica, los Estados miembros deberán evaluar qué combinación de instrumentos utilizarán, cómo repartirán la carga fiscal, qué garantías exigirán y cómo articularán un mecanismo de reembolso basado en activos rusos sin vulnerar principios del derecho internacional. Como alternativa puente, la carta sugiere que las subvenciones y endeudamiento inmediato podrían actuar como soluciones provisionales antes de que entre en vigor el nuevo marco presupuestario de la UE en 2028.
Mientras tanto, para Ucrania y sus aliados, cada día de demora representa un riesgo. La capacidad de resistencia de Kiev depende tanto del armamento como del apoyo económico y logístico exterior; la incertidumbre sobre la financiación compromete la sostenibilidad del esfuerzo. Con la cumbre de diciembre como hito clave, el resultado marcará no solo el futuro de la guerra, sino también la cohesión del proyecto europeo.

Argentina
España
USA
Israel















