Creen que el hombre controla un punto de venta de un capo encerrado en prisión, al que vinculan con el ataque a tiros en el que fue asesinado Máximo Jerez e hirieron a otros chicos
Vecinos y amigos de la familia de Máximo Jerez, el niño de 11 años asesinado este fin de semana en Rosario, atacaron la casa de un dealer de “El Salteño”, un hombre al que acusan de ser el capo narco del barrio “Los Pumitas”, al noroeste de Rosario, y al que vinculan con la balacera en la que también fueron heridos tres primos menores de edad de la víctima fatal.
Según aseguran los familiares del niño, entre ellos, Julio Jerez, el padre del nene asesinado, “El Salteño” es el alias de Cristian Villazón, un hombre que está preso y podría ser el blanco del ataque sicario que derivó en el asesinato de Jerez.
Los vecinos apedrearon uno de los presuntos puntos de venta de Villazón e intentan incendiarla. Uno de los hombres que ocupan la vivienda se resguardó en la terraza de la vivienda precaria y simuló portar un arma de fuego.
Una de las piedras le golpeó en la cabeza y le provocó una herida en el rostro. Con martillos y otros elementos contundentes, los vecinos rodearon la propiedad. Con los minutos, se sumaron más personas que rompieron las paredes de la vivienda.
La Policía llegó al supuesto búnker luego de 10 minutos de incidentes e intentó controlar la situación. El Ministerio de Seguridad de Santa Fe envió a efectivos del Grupo de Infantería de Respuesta Inmediata (G.I.R.I).
Los efectivos se apostaron en la casa que fue atacada por los vecinos y se sumaron más patrullas. En tanto, se escucharon disparos en el área, mientras la policía sacó al presunto narco de la casa, en medio de un importante operativo.
Aunque las personas agrupadas en torno a la vivienda le tiraron piedras y botellazos al “Salteño”, los uniformados lograron ponerlo a salvo. Luego, los vecinos se enfrentaron con la policía. “Si ustedes no hacen justicia esto va a ser peor”, le advirtió uno de ellos a los agentes.
Fuente Infobae