Ante su Gabinete, Javier Milei pidió una revisión profunda de los nombramientos que hizo Alberto Fernández y exigirá presencialidad a los empleados públicos
El Presidente dijo que el equilibro fiscal “no se negocia” y encomendó informes de cada área, incluidos los pases a planta y contrataciones que dispuso la gestión anterior. El vocero Adorni había adelantado que el “empleo militante no va a existir más”.
En su primera reunión de Gabinete, el presidente Javier Milei insistió ante sus ministros la necesidad de “hacer un ajuste en las cuentas“ públicas, reiteró que el equilibrio fiscal “es innegociable” y les encomendó a los funcionarios revisar la situación que recibieron en cada una de las áreas y, en especial, los nombramientos y pases a planta permanente de los últimos seis meses de la gestión de Alberto Fernández.
Antes, el vocero Manuel Adorni había advertido que la gestión de Milei buscaría “poner en valor” al empleado público, pero que el plan era combatir el “empleo militante” en el Estado: “No va a existir más”.
Milei llegó a Casa Rosada pasadas las 8 y abrió la reunión de Gabinete minutos antes de las 9, como estaba previsto. En el Salón Eva Perón lo esperaban el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y los nueve ministros: Sandra Pettovello (Capital Humano), Diana Mondino (Cancillería), Luis “Toto” Caputo (Economía), Guillermo Francos (Interior), Guillermo Ferraro (Infraestructura), Mariano Cúneo Libarona (Justicia), Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Petri (Defensa) y Mario Russo (Salud).
En la cumbre también estuvieron la vicepresidente Victoria Villarruel; el vocero, Manuel Adorni; el titular del Banco Central, Santiago Bausili; el nuevo titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
Y los secretarios Javier Herrera Bravo (Legal y Técnico), Belen Stettler (Medios) y Karina Milei (Presidencia), quien tiene un rol clave en el esquema de toma de decisiones del nuevo Gobierno.
Sonriente y con carpeta en mano, Milei fue recibido con aplausos por su equipo. Tras una introducción, en la que junto a Caputo planteó que el equilibrio fiscal “es innegociable” y pidió hacer un ajuste en las cuentas públicas, abrió el juego a los funcionarios para que den su visión sobre cada área. Varios de ellos, como Mario Russo (Salud), no tuvieron siquiera reunión de transición con sus pares de la administración anterior y desconocen el cuadro de lo que heredan.
“Se puso énfasis de qué manera se encaran algunos puntos en este objetivo principal que tiene el Presidente Milei del reordenamiento del Estado”, contó luego el vocero Adorni en otra rueda de prensa. Un ministro presente en la reunión fue más elocuente: “Nos pidió motosierra”.
Manuel Adorni en conferencia en la Casa Rosada. Foto AFP
Allí señaló que el eje de la cumbre fue “el descalabro de la economía” y anticipó “un fuerte recorte fiscal”, en el que sólo habrá “alguna expansión en partidas sociales”. La vicepresidente Villarruel, quien también ofició de vocera la cumbre, consideró que la Argentina está en “una situación devastadora”
“Habrá una quita de privilegios que el presidente Milei dio la orden de realizar”, agregó Adorni.
El vocero detalló que se acordó “la necesidad del armado de un inventario general”.
Y que se revisarán “cada una de las contrataciones” del último tiempo que realizó la gestión de Fernández, con el objetivo de “encontrar contrataciones irregulares”.
Esto incluye, aclaró, los convenios con universidades. Según pudo saber Clarín, se pondrán bajo la lupa los últimos seis meses de la gestión.
Como contó Clarín, durante su mandato, Fernández dispuso el pase a planta permanente de unos 9 mil empleados, mientras que en algunos ministerios, como hizo Carla Vizzotti en Salud, se renovaron por todo 2024 y sin consulta con la gestión entrante, los contratos de los empleados de la planta transitoria. Estas medidas estarán incluidas en la revisión.
“Se va a comenzar exigir el 100 por ciento de la presencialidad en todos los lugares de trabajo de la administración pública nacional”, prometió.
Milei encabezó la primera reunión de Gabinete.
Adorni había dejado en claro, en un primer contacto con la prensa, que “ningún empleado público debe estar preocupado por su puesto de trabajo” sino “la persona que no trabaja, que está ocupando una silla y cobra un sueldo que pagamos todos”.
“En eso -completó- hay una decisión firme del presidente Milei, que es terminar con ese empleo político, ese empleo militante: ese empleo va a dejar de existir”.
Como símbolo de lo que pretende hacer en el Estado, Milei hizo distribuir una foto de la reunión en la que se advierte el impacto que tuvo la reducción de su Gabinete en relación a su antecesor: en la imagen se ve la mesa semivacía.
Fuente Clarin