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Tras su audiencia privada con el papa Francisco de esta madrugada (09:00 hora local – 05:00 hora argentina), el presidente Javier Milei dejó el Vaticano y volvió a Italia para reunirse con sus mayores figuras políticas.
Así, a las 09:30 (hora argentina) el Presidente se encontró con Sergio Mattarella, Presidente de la República Italiana, mientras que a las 11:00 (hora argentina) hizo lo propio con la principal titular de la nación europea, Giorgia Meloni, presidenta del Consejo de Ministros.
Con Mattarella, Milei “dialogó sobre el vínculo entre ambos países” en busca de reforzar las relaciones comerciales entre las naciones: los dirigentes “coincidieron en iniciar una nueva etapa en el vínculo bilateral y dar una señal de confianza para las inversiones“, señalaron desde Presidencia.
Por su parte, Meloni recibió poco después a Milei “para profundizar la relación bilateral entre ambos países y desarrollar una agenda de trabajo conjunta”.
En ambos encuentros, el jefe de Estado asistió junto a los principales dirigentes presentes en la comitiva argentina: la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; la canciller Diana Mondino, el ministro del Interior, Guillermo Francos; y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
Los detalles de la reunión de Milei con el Papa Francisco
Las reuniones con los dirigentes italianos se dieron pocas horas después de que el primer mandatario se encontrara en audiencia privada con el Papa Francisco: luego de que la comitiva argentina dijera presente en la canonización de Mama Antula -la primera santa argentina- llevada a cabo este domingo en el Vaticano, donde Milei y el Papa se saludaron efusivamente en su primer encuentro cara a cara; hoy se llevó a cabo la audiencia formal.
El encuentro, el cual inició a las 9 de la mañana hora local (05:00 hora argentina), duró unos 70 minutos, tiempo récord para una audiencia entre Francisco y un presidente argentino desde la entronización del Sumo Pontífice en 2013, quien desde entonces se encontró con Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández.
Allí, el Presidente repasó sus planes de Gobierno junto al Papa y, luego, se realizó el tradicional intercambio de regalos junto a los miembros de la comitiva gubernamental en la segunda gira presidencial de Milei desde su llegada al poder.
La audiencia buscó eliminar las tensiones por las críticas previas que Milei manifestó durante su campaña presidencial, cuando llamó al Sumo Pontífice “el representante del maligno en la Tierra” y lo definió como un “jesuita que promueve el comunismo” y un “personaje impresentable y nefasto”.
Sin embargo, durante el debate presidencial el liberal señaló su arrepentimiento y dijo que respetaría a Francisco como “jefe de Estado y líder de la Iglesia”. Tras su victoria en el balotaje, Milei incluso se comunicó con el Papa para pedirle disculpas e invitarlo a visitar la Argentina por primera vez, gesto que repitió en su visita presencial de este lunes.
Uno de los temas en agenda fue la invitación a Jorge Mario Bergoglio para que visite Argentina por primera vez desde que fue entronizado en marzo de 2013, una posibilidad que el Papa considera “una hipótesis” para el segundo semestre del año.
Milei habló de “dinamitar el sistema” con la prensa italiana
En este marco, el Presidente otorgó una entrevista exclusiva al canal local TV Retequattro, la cual se emitirá esta noche en la televisión italiana. Allí, Milei habló de su “profundo desprecio” al Estado.
Además, también fue consultado por las críticas emitidas contra el Papa Francisco en el pasado, a lo que dijo que “reconsideró” su postura para comenzar a “construir un vínculo positivo”.
Consultado sobre su postura religiosa, Milei dijo que es católico, pero que practica “algo de judaísmo”, lo cual se evidenció en su visita previa a Israel en la misma gira. En cuanto al Papa Francisco, destacó que “es la persona más importante de toda la Argentina“.
Por otro lado, el Presidente habló con dureza sobre el rol del Estado y sentó su postura autodefinida como “anarcocapitalista”: “Siento un profundo desprecio por el Estado. Creo que el Estado es el enemigo, una asociación criminal. Son un grupo de políticos que se ponen de acuerdo y deciden usar el monopolio para robar los recursos del sector privado”, disparó.
Aquí, repitió una de sus premisas más fuertes durante su campaña política: “El Estado te roba a través de impuestos todos los días. El Estado tiene el poder de detener a la gente, pero los políticos no se ven afectados ni ven los poderes en juego”, continuó, a lo que sumó: “Por eso me di cuenta de que la única forma que había para entrar al sistema era dinamitarlo“.
En esta línea, cerró con una referencia a la “Ley Bases”, la cual la semana pasada se cayó en Diputados luego de que el oficialismo no alcanzara el apoyo necesario para la votación artículo por artículo.
“Una de las cosas que hemos hecho en estos cincuenta días fue iniciar y poner en marcha reformas estructurales. El eje central tiene que ver con devolver el poder y la libertad a los argentinos. Y luego hay un segundo punto: avanzar hacia estructuras de mercado más competitivas”, concluyó.
Fuente El Cronista
